París declaró este miércoles el estado de emergencia sanitaria en Nueva Caledonia, lo que incluye medidas que prohíben salir de los hogares, anunció el Gobierno. Asimismo, destacando que la pandemia de COVID-19 “constituye un desastre sanitario” en ese territorio francés en el Pacífico Sur. El archipiélago cuenta con 270 mil habitantes, que estuvo durante mucho tiempo al margen de la pandemia. Desde enero viene siendo golpeado por la variante Ómicron, en una segunda ola de contagios por coronavirus. “El primer ministro presentó un decreto por el cual se declara el estado de emergencia sanitaria en Nueva Caledonia”, anunció el portavoz del Gobierno, Gabriel Attal.
“Bajo los efecto de la variante ómicron, la transmisión de COVID-19 experimenta un incremento considerable” en ese territorio, añadió.La víspera del primero de de febrero, la tasa de incidencia en los últimos siete días hábiles era de mil 468 casos cada 100 mil habitantes, lo que constituye un aumento de 40% en este periodo. El martes, el número de personas hospitalizadas aumentó a 26. “La cobertura de vacunación también es más baja en Nueva Caledonia respecto a la metrópoli. El riesgo de desarrollar formas graves de esta enfermedad aumenta de manera considerable y puede llevar muy rápidamente a la saturación de las infraestructuras hospitalarias en el territorio”, indicó el Gobierno. Al 31 de enero, más de 68% de la población de Nueva Caledonia había recibido al menos una dosis de vacuna anticovid, de acuerdo a Attal.