Investigadores de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) acusaron a Israel de “crímenes de guerra y contra la humanidad”, por atacar deliberadamente las instalaciones de salud de la Franja de Gaza, así como de torturar y asesinar al personal médico.
“Israel lleva a cabo una política concertada de destrucción del sistema de salud de Gaza en el marco de su ofensiva en esa zona”, declaró este jueves en un comunicado la Comisión Internacional de Investigación Independiente de Naciones Unidas.
“El país comete crímenes de guerra y contra la humanidad, de exterminación, con ataques incesantes y deliberados contra el personal médico y las instalaciones”, agregaron.
Esta comisión, compuesta de tres miembros y creada por el Consejo de Derechos Humanos en mayo de 2021, para investigar las sospechas de violación al derecho internacional en Israel y los territorios palestinos, publicó su segundo informe desde que estalló la guerra en el enclave palestino, tras el ataque del 7 de octubre de 2023, efectuado por el movimiento islamista Hamás contra el sur de Israel.
Israel, por su parte, acusó a la comisión de “discriminación sistemática” en su contra, y rechazó en bloque las conclusiones del informe de junio, que lo acusaba de cometer crímenes contra la humanidad, entre ellos, la “exterminación” en Gaza.
“Israel debe detener inmediatamente esta destrucción sin sentido de las instalaciones sanitarias, con la que atenta contra el derecho a la salud, algo que podría tener perjudiciales efectos a largo plazo en la población civil”, enfatizó el informe de la comisión que preside la jurista sudafricana, Navy Pillay.
La comisión que forman Pillay y los expertos Miloon Kothari (India) y Chris Sidoti (Australia), destacó que los ataques a la sanidad de Gaza han afectado también instalaciones pediátricas y de cuidado a recién nacidos, en violación del derecho a la vida de numerosos niños.
“Los niños, en particular, se han llevado la peor parte de estos ataques, sufriendo tanto directa como indirectamente, el colapso del sistema sanitario”, señala el informe.
“Al continuar con estos ataques, Israel ha violado el derecho a la vida de los niños, les ha negado el acceso a la atención sanitaria básica y les ha infligido deliberadamente condiciones de vida que han provocado la destrucción de generaciones de niños palestinos y, potencialmente, del pueblo palestino como grupo”, sostuvo la ONU.
Comisión de la ONU acusa a Israel de cometer un crimen de “exterminio” en #Gaza por la destrucción del sistema de saludhttps://t.co/e0oapgYpJs
— Noticias ONU (@NoticiasONU) October 10, 2024
Tratamiento de detenidos y rehenes
El informe dedica un capítulo aparte al tratamiento de detenidos y rehenes en el conflicto entre Israel y Hamás, donde se acusa a las dos partes de torturas, abusos sexuales, asesinatos en cautividad y otras graves violaciones a los derechos humanos.
En el caso de palestinos bajo cautiverio por parte de las autoridades de Israel, “miles de ellos han sufrido abusos sistemáticos” que podrían constituir crímenes de guerra.
“Muchos hombres detenidos son violados, sufren agresiones en sus órganos sexuales y son sometidos a situaciones humillantes, desnudos, con el objetivo de extraer de ellos información”, indica el informe, que también denuncia que muchos menores palestinos detenidos regresan a Gaza “gravemente traumatizados” tras ser liberados.
Los maltratos sobre los detenidos palestinos, asegura el informe, se cometen “bajo órdenes directas del ministro (de Seguridad Nacional) israelí Itamar Ben-Gvir, y son alimentados por declaraciones gubernamentales que incitan a la violencia y la venganza”.
En cuanto a los rehenes israelíes y de otros países, en manos de Hamás y otros grupos armados palestinos, el documento denuncia que muchos han sufrido violencia física, sexual, aislamiento forzado, amenazas, humillaciones y acceso limitado a alimentos, agua y otros bienes básicos.
Han sido forzados a participar en vídeos “con el fin de infligir tortura psicológica a las familias de los rehenes”, y algunos de ellos han sido asesinados en cautividad, por lo que Hamás y otros grupos podrían haber cometido en este sentido crímenes de guerra y contra la humanidad, concluye el documento de la comisión.