La Comisión de Investigación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre Ucrania afirmó que se cometieron crímenes de guerra en el país desde el inició de la invasión rusa en febrero de 2022, por lo que comentó se confirmaron las sospechas que existían sobre este asunto.
“Con base en a las pruebas recogidas por la Comisión, se concluyó que se cometieron crímenes de guerra en Ucrania”, declaró el presidente de ese cuerpo, Erik Mose, durante una primera presentación oral que enumera bombardeos rusos en zonas civiles, numerosas ejecuciones, tortura y malos tratos, y violencia sexual.
La comisión fue presentada en marzo de 2022 por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas para investigar las denuncias hacia las tropas rusas en Ucrania. Después, se aprobó una nueva resolución que pedía a la comisión averiguar sobre las graves violaciones de los derechos humanos cometidas por tropas rusas en las regiones de Kiev, Chernígov, Járkov y Sumy.
Durante sus investigaciones, explicó Erik Mose, en esas cuatro regiones, la comisión visito 27 ciudades y localidades e interrogó a más de 150 víctimas y testigos.
Además, analizaron los cuerpos hallados, en los que distinguieron características comunes: señales visibles de ejecuciones, manos atadas por la espalda, heridas de bala en la cabeza o cortes en el cuello.
“Quedamos impactados por el gran número de ejecuciones en las regiones que visitamos. La Comisión investiga actualmente esas muertes en 16 ciudades y lugares. Recibimos acusaciones creíbles concernientes a más numerosos casos de ejecuciones, que estamos documentando“, declaró.
Investigación pronta
Previo a estos descubrimientos, el secretario general de la ONU, António Guterres, pidió al Consejo de Seguridad investigar el “catálogo de crueldades” perpetrado en las zonas ocupadas por las fuerzas rusas en Ucrania.
“Los informes son un catálogo de crueldades: ejecuciones sumarias, violencia sexual, tortura y otros tratos inhumanos y degradantes contar civiles y prisioneros de guerra“, dijo Guterres en la apertura de una reunión a nivel ministerial del Consejo de Seguridad de la ONU dedicada al conflicto ucraniano.
Asimismo, mencionó que el hallazgo de las fosas con centenares de muertos, entre ellos menores de edad, encontradas en la ciudad de Izium, que recientemente fue recuperada por las fuerzas ucranianas, tras meses bajo control ruso en el este del país, son “sumamente perturbadoras”.
Las víctimas y sus familias, dijo, tienen derecho a justicia, resarcimiento y reparación.
“Poner fin a la impunidad a los crímenes internacionales es fundamental”, puntualizó.
Ante ello, el Kremlin rechazó las acusaciones de que las fuerzas rusas habían cometido crímenes de guerra en la provincia ucraniana de Kharkiv como una “mentira”.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, señaló que los investigadores en el sitio encontraron evidencia de tortura, incluidos cuerpos con las manos atadas y acusaron a las tropas rusas de cometer crímenes de guerra.
Rusia también rechazó previamente las afirmaciones de que sus tropas habían cometido crímenes de guerra en Bucha, en las afueras de Kyiv, después de que salieran a la luz pruebas de la muerte de civiles mientras las tropas rusas controlaban la ciudad después de la retirada de Moscú a fines de marzo.
Una tortura
Después de que las fuerzas rusas se retiraran de la región de Járkov (noreste), un ucraniano acudió a la policía para explicar el infierno que vivió durante la ocupación, entre patadas y descargas eléctricas en los genitales.
“Oleksander” -un hombre de 40 años- afirmó que, el 22 de marzo, un grupo de hombres armados llegaron en dos furgonetas y lo detuvieron.
Sus captores, dijo, resultaron ser miembros de la milicia de la República popular de Lugansk, autoproclamada en 2014 con el apoyo de Moscú, en el este de Ucrania. Sus recuerdos son tan traumáticos como dolorosamente confusos.
De vuelta al lugar en el que vivió su tormento, en un desolado edificio ferroviario, a 3 kilómetros de la frontera rusa, conduce a los periodistas hasta un sótano húmedo.
Con un trapo, barre los restos de cristales que hay por el suelo y se acuesta, para mostrar cómo se agitaba durante los interrogatorios de sus captores, que le engancharon un cable eléctrico en sus partes reproductivas.
Rusia y su nuevo ejercito
Moscú empezó su movilización de tropas adicionales el jueves para reforzar su ofensiva en Ucrania, después de que las autoridades anunciaran que miles de personas se habían presentado voluntariamente.
En imágenes difundidas en las redes sociales después de que el presidente Vladimir Putin ordenara la víspera la movilización de reservistas se puede ver a cientos de ciudadanos rusos respondiendo a convocatorias militares.
El llamado a filas tiene lugar tras los duros reveses de las fuerzas rusas en septiembre, luego de la contraofensiva ucraniana en el noreste y el este del país. También coincide con votaciones de anexión a Rusia en varios territorios ucranianos controlados por Moscú.
El ejército ruso dijo el jueves que cerca de 10 mil personas se presentaron voluntarias en las últimas 24 horas para ser movilizadas.