
El Papa Francisco, de 88 años, ha sido ingresado en el Policlínico Gemelli de Roma para recibir tratamiento por una bronquitis persistente que ha afectado su salud en las últimas semanas.
Debido a su estado de salud, el Vaticano confirmó que el Pontífice no aparecerá en público este domingo para dirigir su tradicional oración semanal.
“Para facilitar su recuperación, el personal médico le prescribió reposo absoluto”, indicó la oficina del jefe de la Iglesia católica en un comunicado.
El hospital Gemelli, el más grande de Roma, cuenta con una sala especial para el tratamiento de los papas. En junio de 2023, Francisco estuvo hospitalizado nueve días tras ser operado de una hernia abdominal.
El portavoz del Vaticano informó que, debido a la persistencia de la bronquitis, Francisco ha sido sometido a análisis médicos especializados y ha comenzado un tratamiento hospitalario con fármacos. Además, presenta una leve fiebre, aunque sus condiciones clínicas han sido calificadas como moderadas.
Complicaciones de salud en los últimos meses
El Papa ha tenido problemas respiratorios desde mediados de diciembre y en febrero mencionó que padecía un fuerte resfriado, lo que obligó a realizar sus audiencias desde su residencia en la Casa Santa Marta. Sin embargo, su condición empeoró en los últimos días, impidiéndole incluso leer algunos discursos.
Esta es la cuarta vez que Francisco es ingresado en el hospital Gemelli. En marzo de 2023, estuvo internado tres días por una infección pulmonar, y en junio del mismo año, fue sometido a una cirugía por una hernia abdominal, permaneciendo hospitalizado nueve días.
En 2021, el Papa pasó diez días hospitalizado tras ser operado de una estenosis diverticular del colon.
Debido a su estado de salud, el Vaticano anunció la cancelación de todas las audiencias del Papa hasta el próximo lunes, lo que incluye su participación en el Jubileo de los Artistas y su visita a los estudios cinematográficos de Cinecittà en Roma.