Un caso de Ómicron fue detectado en Pekín, informaron el sábado autoridades de la capital china, en un contexto en que el gigante asiático lucha para frenar los brotes de esta contagiosa variante de COVID-19 y a 3 semanas de los Juegos Olímpicos de Invierno. Este anuncio tuvo lugar horas después de que la ciudad de Zhuhai, en el sur, en la frontera con Macao, impusiera restricciones de viaje a la población tras la detección de 7 casos de esta variante. Las autoridades de esta ciudad anunciaron, el pasado viernes, que habían detectado un enfermo leve y 6 pacientes asintomáticos, con un cribado masivo entre su población, tras un caso en una urbe vecina. Por ello, suspendieron las líneas de autobuses y pidieron a los residentes no salir de la localidad. En Pekín, el caso, de transmisión local, fue detectado en el distrito de Haidian, donde se encuentran muchas sedes de compañías tecnológicas, dijo el responsable municipal Pang Xinghuo en una rueda de prensa. Las autoridades están haciendo pruebas a los otros ocupantes del bloque residencial del enfermo y de las oficinas, y restringieron el acceso a 17 lugares relacionados con la persona infectada. La capital china ha intentado blindarse contra Ómicron, prohibiendo su acceso a las personas procedentes de zonas con casos registrados y también exigiendo test recientes anticovid, por su parte, las autoridades también pidieron a la población que no saliera de la ciudad en las próximas vacaciones del Festival de Primavera. A tres semanas de los Juegos Olímpicos de Invierno en Pekín (del 4 al 20 de febrero), China se encuentra en alerta por una serie de focos de coronavirus, algunos de ellos vinculados a Ómicron.