En el marco de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), 31 países exigieron al gobierno de Nicolás Maduro, parar las detenciones arbitrarias y las violaciones a los derechos humanos, registradas después de las elecciones presidenciales del 28 de julio en Venezuela.
La declaración está firmada por Estados Unidos, la Unión Europea y algunos países latinoamericanos, como Costa Rica, Guatemala y Perú; aunque cuenta con las notables ausencias de Colombia, México y Chile.
“Estamos profundamente preocupados por la represión generalizada continuada, así como por los informes de abusos y violaciones de los derechos humanos”, se lee en la solicitud divulgada al final de la reunión.
Los países firmantes instan al régimen de Nicolás Maduro a la “liberación inmediata de las personas arbitrariamente detenidas, el fin del uso de la fuerza excesiva, la violencia política y el acoso contra la oposición y la sociedad civil“.
“Si tenemos un objetivo único, éste es garantizar que la voluntad y los votos del pueblo venezolano sean realmente respetados, que puedan determinar su propio futuro y sus voces sean escuchadas”, declaró el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken.
Durante su intervención, la canciller argentina, aseguró que 7.8 millones de venezolanos han huido del país.
Elección presidencial
El presidente Maduro fue declarado ganador con 52%, con lo que accede a un tercer mandato, sin haber presentado hasta ahora los resultados detallados del escrutinio, como obliga la ley, mientras la oposición denuncia fraude.
Liderada por María Corina Machado, la oposición publicó en un sitio web copias de cerca de 80% de las actas electorales, que demostrarían la victoria de su candidato, Edmundo González Urrutia, quien se exilió en España el 8 de septiembre.