
Polonia reforzó la vigilancia militar en su frontera con Bielorrusia para evitar un ingreso masivo de migrantes que huyen de países en conflicto, sobre todo de Afganistán, y otros países de Medio Oriente y África.
En la zona hay casi 4 mil personas, incluidos niños, quienes se resguardan en un campamento improvisado.
El primer ministro polaco, acusó a Rusia de organizar la llegada de migrantes a Bielorrusia, gobierno que les permite el paso para introducirse a Europa.
“Estamos convencidos de que estas operaciones, que tienen lugar en la frontera oriental de Polonia, son un elemento de una operación más grande, un ataque muy coordinado, una guerra de nuevo tipo”, Mateusz Morawiecki, primer ministro de Polonia.