El presidente francés, según la presidencia, Emmanuel Macron, remodeló su Gobierno para encarar su segundo mandato, que se anuncia difícil para aplicar su agenda reformista y liberal tras perder la mayoría absoluta en las pasadas elecciones legislativas
Emmanuel Macron no introdujo cambios en profundidad en el Gobierno de su primera ministra, Élisabeth Borne, del que sale el ministro de Solidaridades, Autonomía y Personas Discapacitadas, Damien Abad, uno de los tres miembros acusados de violación.
La entrada más destacada es la de la actual jefa de economía de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Laurence Boone, como nueva secretaria de Estado de Asuntos Europeos.
Asimismo, el actual ministro delegado a las Colectividades Territoriales, Christophe Béchu, asumirá una de las carteras prioritarias, Transición Ecológica, en sustitución de Amélie de Montchalin, obligada a partir tras perder en las legislativas.
Esta allegada de Macron forma parte de los tres miembros de Gobierno que se presentaron a esos comicios y no lograron su escaño, y que, en virtud de una regla no escrita, deben abandonar sus cargos en el ejecutivo.
Por otra parte, el médico de emergencias, Francois Braun, asumirá así el Ministerio de Salud que deja Brigitte Bourguignon, en plena séptima ola de contagios de COVID-19 en Francia y cuando Borne se propuso descongestionar los hospitales rápidamente.
De igual manera, el director general de la Cruz Roja en Francia, Jean-Christophe Combe, reemplazará a Damien Abad como ministro, después que la justicia abriera la semana pasada una investigación por intento de violación, hechos que el funcionario saliente niega.
La secretaria de Estado de Desarrollo, Francofonía y Asociaciones Internacionales, Chrysoula Zacharopoulou, que niega también las acusaciones de violación en su contra durante el ejercicio de su profesión de ginecóloga, sigue en el cargo.
Al igual que el ministro del Interior, Gérald de Darmanin, que asume también las funciones de Ultramar. La Fiscalía francesa pidió sobreseer a principios de 2022 una denuncia por violación en su contra.
Esta remodelación marca en la práctica el inicio del segundo mandato del presidente centrista, dos días antes del discurso de política general de su primera ministra, y cierra un período de incertidumbre desde su reelección el 24 de abril.
Borne ya inició la negociación con la oposición de su primer proyecto de ley, un paquete de medidas que busca proteger el poder adquisitivo y cuya adopción espera para finales de julio o principios de agosto.