El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, aprobó dos decretos ejecutivos que reglamentan la ley que dispone el uso medicinal y terapéutico del cannabis y sus derivados, a fin de regular el uso y acceso de la sustancia con objetivos terapéuticos, médicos o científicos en todo el país.
“Firmé el Decreto Ejecutivo que reglamenta la Ley 242 de 2021, que regula el uso medicinal y terapéutico del cannabis y sus derivados; una de las regulaciones más sólidas a nivel regional, para permitir el consumo del cannabis procesado y dar alivio a miles de pacientes”, expresó el mandatario panameño.
Asimismo, anunció la creación de la Dirección Nacional para el Monitoreo de las Actividades Relacionadas con el Cannabis Medicinal, adscrita al Ministerio de Seguridad Pública para el control, para la “vigilancia y supervisión de las actividades requeridas”.
Firmé el Decreto Ejecutivo que reglamenta la Ley 242 de 2021, que regula el uso medicinal y terapéutico del cannabis y sus derivados; una de las regulaciones más sólidas a nivel regional, para permitir el consumo del cannabis procesado y dar alivio a miles de pacientes. pic.twitter.com/353KP89gSE
— Nito Cortizo (@NitoCortizo) August 31, 2022
Además, el gobernante explicó que la comercialización de los productos se hará bajo un estricto control de importaciones con un programa de trazabilidad que incluye el monitoreo, desde las áreas de cultivo hasta los laboratorios y puntos de venta final.
Las personas, dijo, podrán consumir cannabis en el país centroamericano serán aquellas que tengan una prescripción médica, siguiendo un fuerte control y supervisión a través de un sistema de registro de pacientes.
También mencionó que las normas aprobadas buscan que Panamá tenga el mejor modelo de gestión para la industria del cannabis medicinal.
Nuestra intención es impulsar a mediano y a largo plazo, el establecimiento de empresas locales y extranjeras que puedan abastecer el mercado interno, utilizando materia prima producida en Panamá indicó.
Por último, destacó que la ley que regula el uso medicinal y terapéutico del cannabis y sus derivados, es el resultado de tres años de trabajo intenso, y de estrecha colaboración y coordinación entre diversas instancias del Órgano Ejecutivo y la Asamblea Nacional.