Israel mantiene otros cinco frentes de guerra en Medio Oriente, además de la Franja de Gaza y Cisjordania de los territorios palestinos.
Irán, Irak, Siria, Líbano y Yemen son parte de la lista de países donde el Gobierno de Benjamin Netanyahu mantiene algún tipo de operación militar, argumentando preocupaciones en materia de seguridad.
En Líbano, Israel mantiene sus tropas al sur del territorio a pesar del alto al fuego que pactó con la organización Hezbolá, el 26 de noviembre de 2024. Y desde entonces, no ha dejado de realizar ataques.
Ayer martes, las tropas israelíes bombardearon diversas viviendas en al menos tres áreas diferentes en el sur libanés, cinco días antes de que expire el plazo establecido en el acuerdo para que salga completamente del territorio libanés.
En tanto, las fuerzas de paz de la ONU continúan supervisando la finalización del acuerdo de entre Israel y Hezbolá, que ha permitido el regreso de los civiles a la zona.
“Todavía hay un alto porcentaje de habitantes que no han podido regresar a sus casas, pero hay mucho más movimiento de civiles en las zonas circundantes”, dio a conocer Victoria Laguna, de las fuerzas de paz de la UNIFIL.
Israel también mantiene ataques contra los hutíes de Yemen, quienes han asegurado que limitarán sus ataques en el corredor del Mar Rojo sólo a barcos afiliados a Israel, luego que comenzó el alto al fuego en la Franja de Gaza.
Las partes también mantienen el lanzamiento de misiles, el último fue confirmado por el grupo hutí contra el ministerio de defensa israelí en Tel Aviv.
“El misil alcanzó su objetivo con gran precisión, por la gracia de Dios, y los sistemas de interceptación no lograron hacerle frente”, dijo Yahya Sarea, vocero militar Hutí.
Los ataques israelíes contra la infraestructura de Yemen han disminuido la capacidad portuaria del país a solo el 25%, en medio de combates con los hutíes.
El Gobierno israelí también ha reforzado sus posiciones en el sur de Siria, con quien comparte frontera y luego que cayera el Gobierno de Bashar al Assad.
Y es que los combates se intensificaron entre el ejército nacional sirio, respaldado por Turquía, y las fuerzas democráticas sirias lideradas por los kurdos y respaldadas por Estados Unidos.
El nuevo Gobierno intenta encontrar la paz en el territorio, tras 13 años de guerra civil.
En Irak, el Gobierno intenta convencer a las facciones armadas del país para que dispongan sus armas y dejen de luchar contra las fuerzas estadounidenses y disparado cohetes y drones contra Israel.