Donald Trump inició ayer su segundo mandato como presidente de Estados Unidos, y con él, entraron en funciones también los integrantes de su gabinete.
Se trata de un grupo de mujeres y hombres cuya postura, se estima, sea a favor del endurecimiento de las políticas económicas y migratorias. Este equipo de trabajo jugará un papel relevante en el desarrollo y aplicación de las nuevas políticas de Gobierno en Estados Unidos.
El primero es el vicepresidente James David Vance, quien fue senador por Ohio y pasó de ser un crítico de las políticas de Trump a apoyar su discurso populista y antiinmigrante.
Conocido como J.D. Vance, el republicano se ha pronunciado por reforzar la seguridad fronteriza, el financiamiento de un muro y el cierre de la frontera para evitar la migración irregular.
Marco Rubio, quien fue ratificado como secretario de Estado por el Senado, se convirtió en el primer latino en ocupar el cargo. Es hijo de inmigrantes cubanos y se postuló para acompañar a Trump en su fórmula como vicepresidente.
Como senador formó parte de la Comisión de Inteligencia y tiene experiencia en política exterior. Rubio apoya al nuevo presidente de Estados Unidos en sus políticas contra Cuba, Venezuela y Nicaragua, así como en el ejercicio de máxima presión sobre China. Además, es defensor de Israel y se ha pronunciado por poner fin a la guerra en Ucrania.
Pam Bondi fue nombrada como procuradora general. Fue fiscal general de Florida y ayudó a Donald Trump en su juicio político de 2019, cuando fue acusado y absuelto de presionar a Ucrania para investigar a Joe Biden, su entonces oponente rumbo a la Casa Blanca.
Bondi ha declarado que su prioridad será el procesamiento de delitos violentos, las pandillas, narcotraficantes y combatir la crisis en la frontera.
Como secretaria de Seguridad Nacional fue nombrada Kristi Noem, exgobernadora de Dakota del Sur. Se encargará de restablecer la política “Quédate en México” y cancelar la aplicación CBP One que permitía a los solicitantes acceder a una cita para realizar el trámite. Además, priorizará la deportación de personas migrantes que cometieron delitos.
Jamieson Greer fue nombrado como representante comercial de Estados Unidos. Durante el primer gobierno de Trump, fue jefe de personal del exrepresentante Robert Lighthizer.
Juntos impulsaron la aplicación de aranceles a productos procedentes de China y otros países; además participó en la renegociación de Tratado de Libre Comercio de América del Norte, TLCAN.
Otro funcionario que ha prometido combatir la migración irregular es Tom Homan, el “zar fronterizo”. Con experiencia en el sector, al haber sido director interino del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), ha advertido con realizar redadas masivas para expulsar personas migrantes con antecedentes penales.
Tulsi Gabbard estará al frente de la Dirección de los Servicios de Inteligencia. Es veterana de la Guardia Nacional del Ejército y abandonó el Partido Demócrata al no lograr la postulación a la Presidencia en el 2020.
Participó en la guerra de Irak como comandante de la Guardia Nacional de Hawái y es reservista del ejército. Los medios de Estados Unidos consideran que tiene poca experiencia directa en labores de inteligencia.
Chris Wright fue nombrado como secretario de Energía. Fue director de la empresa de “fracking”, Liberty Energy.
Tiene experiencia en los sectores nuclear, solar, geotérmico, del petróleo y el gas. Ha sido asesor del ahora presidente Trump en temas de energía durante su campaña, y al igual que él, duda sobre la existencia de la crisis climática.