Se visten como en la Edad Media y han jurado dar su vida por el papa, ¿quiénes son los guardias suizos?
La Guardia Suiza es el ejército más pequeño del mundo con sólo 135 soldados. Data de 1506 y exige que los reclutas sean menores de 30 años, solteros, católicos y que estén dispuestos a dar la vida por el papa.
Si bien usan un sobrio traje negro cuando viajan con el papa, en sus tareas dentro del Vaticano se les observa con uno de los uniformes más antiguos del mundo.
La Guardia Suiza: 500 años protegiendo al Papa. Fundada en 1506 por el Papa Julio II, la Guardia Suiza Pontificia es la fuerza militar más antigua y pequeña del mundo, con 135 soldados suizos católicos. pic.twitter.com/PyibxuyYoA
— News Vaticano 🇻🇦 (@news_vaticano) April 23, 2025
Hechos a la medida y multicolores, van acompañados de una alabarda, una especie de lanza que es un arma multifuncional, además en momentos solemnes incluso usan una armadura que está hecha con métodos tradicionales de la Edad Media.
Su entrenamiento, a cargo del Ejército Suizo, los prepara durante varios meses para responder ante un ataque terrorista o una agresión personal contra el pontífice en turno. La disciplina es tal, que se les exige estar inmóviles durante varias horas.
Probablemente el cuerpo de seguridad más particular del mundo. La Guardia Suiza, en el Vaticano.
— Puerta de Tannhäuser (@Javi_Etxebarria) December 19, 2024
Ojo al vídeo que acaban de publicar pic.twitter.com/2CARLsjIPD
Sin embargo, en eso el papa Francisco también rompió protocolos. Si bien sus antecesores ni siquiera hablaban con los guardias, el papa los saludaba con frecuencia y les dedicaba sonrisas.
Una de las anécdotas más conocidas fue cuando vio a un guardia y le preguntó si había estado parado toda la noche. Cuando él le respondió que sí porque era una indicación de su capitán, Francisco le respondió que él, como papa, le ordenaba descansar.
Ante la resistencia del guardia, el papa le acercó una silla y apareció unos minutos después con un sándwich de jamón en la mano. “Bon apetit, hermano mío”, y se fue.