Internacional

Recuento de lo ocurrido esta semana en el juicio contra Genaro García Luna

En el último día de audiencias de esta semana, un agente de la DEA y un expolicía federal revelaron que la agencia antidrogas tenía información desde hace más de 10 años sobre la relación entre capos y el exsecretario.

Sobornos, asesinatos, secuestros, decomisos, trasiego, acuerdos, colectas, detenciones, traiciones, montajes, narcos disfrazados de policías, mansiones, motocicletas de lujo, leones e hipopótamos, guerra del narco, miles de toneladas de cocaína, narco periodistas, Colombia, Estados Unidos, México.

Todo, todo se relacionó con Genaro García Luna. El hombre del que la Administración de Control de Drogas​ (DEA), al decir de un testigo, sabía desde hace más de una década sobre sus nexos con el crimen.

A partir del pasado 23 de enero en la Corte de Nueva York, como balas, capos de la droga lanzaron declaraciones en contra del “Compa”, “El Licenciado”, “El Señor Metralleta”, “El Tartamudo”, como le apodaban a García Luna.

Testigos

Seis narcotraficantes, ahora testigos colaboradores, sostuvieron que hacían colectas de dinero para “El Super Policía” mexicano, para que les dejara mover impunemente toneladas de droga, obtener información de los cárteles contrarios y protección de agentes de la policía federal.

Durante siete días, García Luna ha escuchado también el testimonio de once policías estadounidenses y mexicanos que detallaron operativos, decomisos y la complicidad entre criminales y funcionarios de seguridad en México entre 2000 y 2012.

Los interrogatorios abrieron con Sergio Villareal Barragán, “El Grande”. Detalló que García Luna formaba parte de la nómina del Cártel de Sinaloa y recibía entre millón y millón y medio de dólares mensuales.

“Lo vi en varias reuniones. En una ocasión Arturo Beltrán Leyva le entregó entre 14 y 16 millones de dólares en efectivo, en cajas de cartón, no cabían en la camioneta que traían y se las llevaron en una Suburban que traíamos nosotros”

A decir del capo, bajo la protección del exfuncionario calderonista, el cártel creció, de tener el control en seis estados en 2001, hasta 18 entidades en 2010.

“No teníamos rival, ese crecimiento no hubiera sido posible sin el apoyo de distintos gobiernos, corporaciones, de la AFI y de García Luna. Los funcionarios formaban parte de la organización”.

El grande declaró que cuando estalló la guerra al interior del Cártel de Sinaloa entre los Beltrán Leyva, Ismael El Mayo Zambada y Joaquín El Chapo Guzmán, García Luna fue levantado porque, dijo, estaba apoyando a un grupo.

Otro testigo, Tirso Martínez, alías el futbolista, reveló que mediante una ruta ferroviaria y otra marítima llevaban droga a Los Ángeles, Nueva York y Chicago.

Óscar Nava Valencia, “El Lobo”, exlíder del Cártel del Milenio, dijo que a García Luna le entregó 10 millones de dólares.

“Le dábamos dinero en efectivo dólares, la primera vez en 2006, hicimos una polla, entre todos íbamos a tener un arreglo más grande para todos, “Arturo” (Beltrán Leyva), “La Barbie, “El Azul” y “El Indio” contribuí con dos millones y medio de dólares”.

Aseguró que le entregó 5 millones de dólares para obtener información sobre un decomiso que hizo la Marina de 20 toneladas de cocaína en el Puerto de Manzanillo.

Durante el juicio ha salido a relucir que el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México, era centro del tráfico de narcóticos.

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Esas eran las claves para que los policías federales dejaran pasar la droga a Estados Unidos, procedente de Colombia o Venezuela.

Israel Ávila es el hombre que reveló la existencia de un registro de sobornos que entregaban a García Luna, registrado como “el tartamudo o El Metralleta”.

Pero quizá una de las revelaciones más fuertes que se ha dado, es la supuesta relación de periodistas y medios de comunicación con el narcotráfico. Ávila explicó que cuando se detuvo al Rey Zambada, se llamó a un periodista para que acudiera al lugar ya que las autoridades mexicanas querían cambiarlo por otra persona.

Los fiscales también presentaron a Harold Mauricio Poveda Ortega, “El Conejo”, el hombre que fue presentado el 5 de noviembre 2010, aunque aseguró fue un montaje, porque la policía federal le pidió revelar donde estaban sus casas, para luego saquearlas.

En el último día de audiencias de esta semana, un agente de la DEA y un expolicía federal revelaron que la agencia antidrogas tenía información desde hace más de 10 años sobre la relación entre capos y el exsecretario.

Miguel madrigal el agente de la DEA también reveló que, frente a la embajada de estados unidos en el restaurante, campos elíseos, los criminales se reunían con funcionarios mexicanos para darles sobornos.

Fue Francisco Cañedo Zavaleta, policía federal, quien se convirtió en el primer testigo en afirmar que él, directamente, vio a García Luna con Arturo Beltrán Leyva, “El Barbas”, y Édgar Valdez, “La Barbie”.

En el número 1672 de la revista del año 2008, se publicó un reportaje titulado “Vínculos García Luna-El Mayo”, donde se presenta parte de la carta que el expolicía mexicano entregó, y ahí se señala el momento del encuentro entre el exsecretario y los capos, además de indicar que García Luna se dedicaba a montar supuestas detenciones como el controvertido caso de Florence Cassez.

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