
El primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, instó al presidente de Rusia, Vladímir Putin, a comprometerse con un alto el fuego en Ucrania, destacando que los aliados mantendrán la presión sobre el Kremlin hasta lograr una tregua.
En una reunión virtual de líderes europeos, Starmer convocó a distintas naciones a unirse a la llamada “Coalición de Voluntarios“, con el objetivo de garantizar la seguridad de Ucrania y respaldar una eventual paz.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, afirmó que varios países apoyan la propuesta de Estados Unidos de una tregua incondicional de 30 días como primer paso hacia una paz estable y justa.
Durante la reunión, se acordó que los responsables militares de los países involucrados en la Coalición de Voluntarios se reunirán el próximo jueves en Reino Unido para avanzar en los planes de un posible despliegue de tropas en suelo ucraniano.
“Reforzaremos las fuerzas armadas de Ucrania y estaremos listos para desplegarnos por tierra, mar y aire”, señaló la declaración final de la cumbre.
Además, Starmer aseguró que los aliados aumentarán la presión sobre Rusia, reforzando las restricciones económicas con el fin de debilitar el poder de Putin y forzarlo a la mesa de negociación.
“El mundo necesita acción, no estudios ni palabras vacías”, enfatizó el primer ministro británico, agregando que Rusia debe cesar los ataques y aceptar un cese al fuego inmediato.
Europa endurece postura contra Rusia
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, respaldó la iniciativa de Starmer, señalando que la Unión Europea continuará apoyando a Ucrania mediante el envío de armas y asistencia militar.
Por su parte, el presidente español Pedro Sánchez participó en la reunión desde La Moncloa, reiterando su respaldo a Ucrania y su compromiso con la Coalición de Voluntarios.
Sin embargo, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, descartó la posibilidad de enviar tropas a territorio ucraniano, asegurando que su país seguirá apoyando diplomáticamente, pero sin intervención militar.
Zelenski, por su parte, acusó a Moscú de frenar el alto el fuego, afirmando que Putin no quiere detener el conflicto y que sigue imponiendo condiciones que retrasan una solución pacífica.
Los líderes aliados coincidieron en que el camino hacia la paz debe comenzar sin condiciones, y que Rusia debe demostrar su disposición a un acuerdo real.