La represión de los militares contra los manifestantes que protestan contra su Golpe de Estado en Myanmar causó este viernes una primera víctima mortal, con el fallecimiento de una mujer que fue herida de bala, en un contexto de creciente presión internacional contra la junta.
Mya Thwate Thwate Khaing recibió un disparo en la cabeza el 9 de febrero, en una manifestación contra el Golpe de Estado en NaiPyidó, la capital administrativa de Myanmar.
Los enfrentamientos estallaron aquel día cuando las fuerzas de seguridad empezaron a lanzar balas de goma contra los manifestantes.
Los médicos del hospital de la ciudad dijeron entonces que al menos dos personas habían resultado heridas de gravedad por balas reales, una de ellas la joven fallecida este viernes.
Buena parte del país se rebeló cuando la junta derrocó a la jefa del gobierno civil Aung San Suu Kyi el 1 de febrero, y desde entones la mantiene en arresto domiciliario.
Las presiones se han multiplicado sobre los militares, que hasta ahora hacen oídos sordos frente a las múltiples condenas y sanciones internacionales.
Reino Unido, antigua potencia colonial, anunció el jueves que sancionaba a tres generales por graves violaciones de derechos humanos.
Canadá, por su parte, sancionará a nueve responsables militares, y acusó a la junta de haber llevado a cabo una acción sistemática de represión a través de medidas legislativas coercitivas y el uso de la fuerza.
El jefe de la junta, el general Min Aung Hlaing, se ha convertido en un paria internacional tras los atropellos cometidos contra los musulmanes rohinyás en 2017.
La semana pasada, el presidente estadounidense Joe Biden anunció que Washington bloquearía el acceso de los generales a un fondo de mil millones de dólares en Estados Unidos.
Los grupos de defensa de derechos humanos se congratulan por estas iniciativas, pero creen que hay que ir más lejos.
Pese a la dura represión, prosiguen los llamados a la desobediencia civil con numerosas manifestaciones y huelgas.
Además, el país ha sufrido cortes de internet por quinta noche consecutiva, según una organización especializada instalada en Reino Unido, indicando que hubo una reanudación del servicio el viernes a las 09:00 horas locales.