Un soldado de la Guardia Nacional de Estados Unidos rescató de las aguas del Río Bravo a una niña migrante salvadoreña de 10 años, quien fue abandonada por cuatro adultos cuando fueron detectados.
Los mayores regresaron nadando a México cuando se vieron sorprendidos.
El militar que la rescató llamó a los paramédicos de la agencia federal para la cual está asignado, quienes le prestaron primeros auxilios; la menor no requirió hospitalización.
La niña, ya del lado de Estados Unidos cerca de Laredo, Texas, fue llevada por la Patrulla Fronteriza a un albergue para menores.
Ante el flujo migratorio, episodios como éste ocurren a menudo en la frontera dividida por el Río Bravo.