
El grupo palestino Hamás respondió a la propuesta de cese al fuego presentada por Estados Unidos, con una contraoferta que incluye enmiendas como el repliegue total de las fuerzas de seguridad israelíes.
Además, Hamás pide garantías para continuar con las negociaciones que lleven a un cese al fuego permanente y que la ayuda humanitaria que entra al enclave sea continua.
Incluye la liberación de 10 rehenes vivos y los cuerpos de otros 18 a cambio de un número acordado de personas palestinas prisioneras en cárceles israelíes.
La propuesta estadounidense que ya fue aprobada por Israel determina que los ataques serían detenidos por 60 días, se permitirá la entrada de ayuda humanitaria y serán liberados rehenes a cambio de prisioneros palestinos.
Funcionarios israelíes dijeron a medios locales que la contrapropuesta de Hamás es un rechazo debido a lista de cambios que pide a la iniciativa estadounidense.
En tanto, el enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio, Steve Witkoff, dijo que la contrapropuesta de Hamás “es totalmente inaceptable” y sólo los lleva a retroceder para alcanzar un alto al fuego.
En el terreno, miles de palestinos siguen enfrentando ataques israelíes y la escasez de alimentos, a pesar de la entrega de ayuda que hacen Israel y Estados Unidos a través de sus centros de ayuda ubicados sólo al sur del territorio.
El Programa Mundial de Alimentos denunció que esto ha excluido de la ayuda humanitaria a más de un millón de palestinos en el norte y provoca caos y aglomeraciones entre quienes se desplazan para conseguir comida.
El organismo también informó que 77 camiones que transportaban harina fueron saqueados por “personas hambrientas que intentaban alimentar a sus familias”, tras más de 80 días del bloqueo absoluto de suministros.