Ícono del sitio Once Noticias

Rey Carlos III aparece en público tras anuncio de cáncer

FOTO: AFP

El rey Carlos III abandonó este martes en coche su residencia londinense de Clarence House junto a la reina Camila, en su primera aparición pública desde que se anunciara sobre su padecimiento de cáncer, indicó un fotógrafo de la AFP.

El monarca, de 75 años, y su esposa saludaron sonrientes a la multitud desde el asiento trasero del automóvil. Según la agencia de noticias británica PA, debían ir al cercano Palacio de Buckingham antes de tomar un helicóptero para dirigirse a su residencia de Sandringham, en el este de Inglaterra.

Su hijo, el príncipe Enrique -que durante algunos años ha tenido relaciones difíciles con la familia real- aterrizó pocas horas antes en el aeropuerto de Heathrow, de acuerdo con los medios británicos, para visitar a su padre.

Tras 17 meses en el trono, Carlos III, que recibió su primer tratamiento el lunes, estará ausente de la vida pública por tiempo indefinido.

Los deseos de recuperación llegaron de todo el mundo después del anuncio, que causó conmoción en el Reino Unido.

El primer ministro británico, Rishi Sunak, quiso transmitir un mensaje de tranquilidad sobre la salud del rey y aseguró a la BBC que el cáncer del monarca fue “detectado temprano”.

El tumor, del que no se ha especificado la naturaleza ni la gravedad, fue descubierto durante la hospitalización de Carlos III a raíz de una operación de hipertrofia “benigna” de próstata, a la que se sometió el 26 de enero.

Turistas y británicos, que aún están digiriendo la noticia sobre el diagnóstico de cáncer del rey Carlos III, manifestaron su compasión y deseos de pronta recuperación para el soberano ante el Palacio de Buckingham en Londres.

La inusual presencia de la prensa internacional delante de las puertas del palacio evidencia la importancia de la información publicada la víspera por la familia real.

Visita de Enrique suscita esperanzas de reconciliación

El viaje desde Los Ángeles a Londres del príncipe Enrique para visitar a su padre, a raíz de que le diagnosticaran un cáncer, suscita en el Reino Unido esperanzas de reconciliación, tras años de asperezas entre ambos.

Enrique, de 39 años, reaccionó con celeridad, el lunes, al impactante anuncio del cáncer del monarca.

Menos de 24 horas después del anuncio, el príncipe llegó este martes a Londres y aterrizó en Heathrow. The Telegraph aseguró que visitará a su padre en su residencia londinense de Clarence House.

Enrique viajó sin su esposa Meghan ni sus dos hijos, Archie y Lilibet, según la prensa, como ya ocurrió con su visita relámpago para la coronación de su padre en mayo.

“¿Ha llegado el momento de que Enrique vuelva a casa?”, se preguntaba el tabloide Daily Mirror que, como la mayoría de los periódicos británicos, dedicaba el martes amplios artículos a una posible reconciliación real, en tiempos difíciles para la monarquía británica.

La enfermedad del monarca llega en un momento en que su nuera Catalina de Gales, esposa de su otro hijo, Guillermo -el primogénito y heredero al trono-, se recupera de una operación abdominal.

Esta repentina enfermedad del rey deja a la reina Camila, de 76 años, y a Guillermo, de 41, a cargo de representar públicamente a la monarquía, cuyo círculo se ha ido reduciendo progresivamente en los últimos años con la marcha de Enrique a Estados Unidos en 2020 y la marginación del príncipe Andrés, hermano de Carlos III, tras acusaciones de agresión sexual a una menor, que él niega.

Ambos perdieron su papel como posibles sustitutos de Carlos III en caso de ausencia o enfermedad del monarca, al dejar de ser “miembros activos” de la familia real británica.

La última visita al Reino Unido del duque de Sussex, título oficial del príncipe Enrique, se remonta a junio de 2023, para asistir a uno de los numerosos juicios que le enfrentan a los diarios sensacionalistas británicos.

Enrique responsabiliza a esos medios de la muerte, en 1997, de su madre Diana, perseguida por los ‘paparazzi’, y del reciente acoso a su esposa Meghan.

En la sombra

Pero la relación tensa de Enrique con su padre se extiende también a su hermano Guillermo, con quien estuvo muy unido tras la muerte de la princesa Diana. En aquel entonces, tenían 12 y 14 años respectivamente.

Sin embargo, con el tiempo, empezaron a surgir tensiones y el distanciamiento se hizo más patente tras el matrimonio de Enrique en 2018 con la actriz estadounidense Meghan Markle, en un contexto de presión constante de la prensa sensacionalista británica.

La pareja acabó dando un portazo a la familia real y renunciando a sus obligaciones oficiales y se mudó a Estados Unidos en 2020. Desde allí, criticaron duramente a la monarquía británica en entrevistas y en una serie documental en Netflix.

En su libro “En la sombra”, el príncipe Enrique se muestra especialmente crítico con su hermano mayor, y relata su frustración por haber sido su “sombra, (su) suplente, (su) plan B”.

En una entrevista concedida a la influyente presentadora estadounidense Oprah Winfrey, Enrique y Meghan afirmaron que algún miembro de la familia real se había interrogado sobre el color de piel que tendría su hijo Archie, iniciando un debate en el Reino Unido sobre el racismo en el país y dentro de la monarquía.

A principios de diciembre, los nombres del rey Carlos III y de la princesa Catalina fueron mencionados en relación a esa conversación en la versión neerlandesa de un nuevo libro sobre los Windsor, rápidamente retirado de la venta por su editor, debido a un “error de traducción”, informaron los medios británicos.

La última vez que los príncipes Guillermo y Enrique aparecieron juntos fue en septiembre de 2022, con sus esposas, tras la muerte de Isabel II.

Salir de la versión móvil