Seis personas murieron por disparos de la policía kurda en Manbij y sus alrededores, una ciudad en el norte de Siria escenario en estos dos últimos días de enfrentamientos y protestas contra el reclutamiento obligatorio, informó el miércoles una ONG.
Seis manifestantes murieron en 48 horas por los disparos de las fuerzas de seguridad, durante las manifestaciones organizadas contra el reclutamiento obligatorio”, informó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).
Este miércoles las autoridades anunciaron una suspensión de la conscripción obligatoria, la liberación de manifestantes detenidos y la creación de una comisión investigadora sobre las violencias del lunes y el martes.
El lunes, una persona murió cerca de Manbij por disparos de la policía kurda. Al día siguiente, la movilización aumentó, los manifestantes bloquearon carreteras y atacaron un puesto de control, lo que causó más muertos.
Estos incidentes, en una región de mayoría árabe, pero con presencia kurda, ponen de manifiesto los límites de la administración semiautónoma kurda frente al descontento popular, atizado por los problemas económicos.
El alistamiento dura cerca de un año y sirve para alimentar los rangos de una unidad bajo las órdenes de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), explicó el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.
Las FDS, punta de lanza de la lucha antiyihadista y que cuentan con el apoyo de los países occidentales, controlan actualmente extensas zonas del este y nordeste de Siria.
Desde fines de 2019, soldados gubernamentales sirios están en Minbej, tras un acuerdo entre el gobierno de Bashar al Asad y los kurdos.
La administración autónoma está en medio de un colapso económico”, subrayó el experto en Siria Nicholas Heras.
Esto le dará a Turquía, a Asad y sus aliados oportunidades para derrotar a la administración. Acelerará la inestabilidad. Muchos Minbej se perfilan en el horizonte”, agregó.