La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo apuntó que su gobierno mantiene contacto permanente con los Consulados de Estados Unidos para que las y los connacionales detenidos en este país no pasen tanto tiempo en los centros de detención y se garantice el respeto a los derechos humanos.
Esto luego de que organizaciones civiles revelaron que personas migrantes han denunciado “tratos inhumanos” en los centros de detención estadounidenses, la presidenta destacó que el Consulado de México trabaja para que las y los connacionales sean deportados y repatriados de manera inmediata.
“Conocemos que hay algunos mexicanos en este centro de detención y estamos insistiendo en que sean deportados de inmediato”, dijo Sheinbaum.
Asimismo, la mandataria reveló que su administración envió una nota diplomática cuando supo que el gobierno estadounidense enviaría a las personas migrantes detenidas a Guantánamo a fin de que “cualquier mexicano sea deportado de inmediato”.
🟤 #MañaneraDelPueblo | Ante la detención de personas migrantes de México en EUA, la presidenta afirma que hay contacto permanente con consulados en ese país.
— Once Noticias (@OnceNoticiasTV) July 22, 2025
“Mandamos notas diplomáticas para que connacionales sean deportados de inmediato, el Consulado vigila si hay… pic.twitter.com/KxKRcnkzJn
Esta misma acción, señaló la mandataria, se llevó a cabo en diversos centros de detención para personas migrantes en Estados Unidos.
“Lo que hemos solicitado es que se deporten de inmediato para poderlos repatriar”, señaló.
Actualmente, dijo, hay “14 [personas mexicanas] internadas y se están haciendo todas las gestiones para que sean repatriados de inmediato”.
Esto luego de que la organización Human Rights Watch publicó testimonios de personas migrantes que estuvieron internadas en el Centro de Procesamiento de Servicios de Norte de Krome (Krome), el Centro de Transición de Broward (BTC, por sus siglas en inglés) y el Centro Federal de Detención (FDC, por sus siglas en inglés), en el estado de Florida.
Dichas declaraciones exponen que las personas migrantes fueron atadas con las manos en la espalda y obligadas a arrodillarse para comer, además sufrieron humillaciones, maltratos y faltas a sus derechos humanos.