A pesar del cese al fuego que está en vigor y tras la entrega de 32 personas israelíes que permanecían en gaza, Israel sigue atacando a civiles gazatíes.
Al menos seis personas murieron por un ataque de drones israelíes en Gaza y en Jan Yunis, al norte y sur del territorio, acusadas de estar “cerca” de la llamada “línea amarilla”, un límite impuesto por Israel en el acuerdo pactado.
Autoridades de Gaza dijeron que se trataba de personas que intentaban llegar a sus casas, luego de los masivos desplazamientos.
El gobierno israelí también disminuyó a la mitad la entrada de camiones con ayuda humanitaria, otro de los puntos acordados.
A esta acción se suma la decisión israelí de mantener cerrado el cruce fronterizo de Rafáh, al señalar que la organización Hamás considera insuficiente el ritmo de entrega de cuerpos de personas israelíes que murieron, muchas por los propios ataques de su país.
Hamás informó que en las próximas horas entregará ataúdes con los cuerpos de otros cuatro israelíes.