Al menos una persona murió y más de 160 resultaron heridas en un potente sismo de magnitud 7.4 en el este de Japón, según un balance oficial publicado este jueves.
El temblor derrumbó partes de casas, abrió grietas en las carreteras e hizo descarrilar un tren, en el cual afortunadamente no hubo víctimas.
Los daños parecen relativamente menores en comparación con la potencia del sismo, que afectó principalmente a los departamentos de Fukushima y Miyagi.
Según la Agencia Meteorológica de Japón (JMA), el temblor se produjo el miércoles a las 23:36 horas local y fue de magnitud 7.4.
El epicentro se situó a 60 kilómetros de profundidad bajo el Océano Pacífico, frente a las costas de Fukushima, donde una central nuclear fue arrasada por un tsunami en 2011.
La JMA emitió un aviso de olas de hasta un metro de altura pero finalmente se registraron olas de 30 centímetros en Ishinomaki, prefectura de Miyagi, según la agencia. Las autoridades había pedido a los residentes que se alejaran del paseo marítimo.
Asimismo, la alerta de tsunami se levantó este jueves por la mañana.
“La policía y los servicios de rescate han recibido muchas llamadas en Fukushima y Miyagi”, dijo un portavoz del gobierno, Hirokazu Matsuno.
También se registraron pequeñas réplicas a lo largo de la noche y en algunas localidades se emitieron órdenes de evacuación hacia refugios.
El temblor, que se sintió con fuerza incluso en Tokio, dejó inicialmente sin electricidad a más de 2 millones de hogares en la capital y los departamentos vecinos, según Tokyo Electric Power (Tepco), pero la electricidad se restableció por completo unas horas después.
“Unos 2 mil 500 hogares seguían sin electricidad en el noreste del país este jueves”, según Tohoku Electric Power.
La compañía ferroviaria JR East informó de interrupciones en su red. Un ‘shinkansen’, el tren de alta velocidad de Japón, descarriló al norte de la ciudad de Fukushima con 78 personas a bordo, pero no hubo heridos.
Y en la ciudad de Sendai, un muro se derrumbó en el lugar del histórico castillo de Aoba.
Japón guardó el viernes pasado un minuto de silencio en recuerdo del terremoto y el tsunami del 11 de marzo de 2011.
Esa catástrofe dejó más de 18 mil 500 muertos y desaparecidos, principalmente a causa del tsunami, y obligó a más de 165 mil personas de la prefectura de Fukushima a evacuar sus hogares a por las emisiones radiactivas.