La discográfica Sony Music decidió abandonar el mercado ruso por el peso de las sanciones internacionales, incluyendo a las y los artistas rusos a los que produce, así lo adelantó el diario económico Nikkei citando fuentes de la empresa.
La unidad rusa de la empresa transfirió el control de sus operaciones a una compañía local, según detalla Nikkei, que afirma que el nombre de la entidad que hereda estos derechos, el importe de la transacción y el impacto sobre la plantilla no se han detallado.
Tras el inicio de la invasión las filiales de Sony suspendieron actividades hasta nuevo aviso. Sony ahora forma parte de la lista de marcas que decidieron paralizar sus operaciones en Rusia, después de que el gobierno que dirige Vladimir Putin decidiera invadir Ucrania.
Además del sector de la música, otros negocios gestionados por Sony en Rusia, como los juegos y el cine, siguen suspendidos.
Sony se suma a aquellas empresas que sale del mercado ruso de forma definitiva tras el agravamiento de la guerra.
Otras empresas salen
En marzo el gigante de la moda de lujo LVMH, que posee varias marcas de lujo, incluidas Louis Vuitton, Christian Dior, Fendi y Givenchy, confirmó a The New York Times, que cerró temporalmente sus tiendas en Rusia.
En mayo, McDonald’s llegó a un acuerdo para vender su negocio en Rusia al empresario local Alexander Govor, quien tiene varias franquicias de la cadena. Este anuncio se produjo tres días después de que la empresa de comida informó su salida del mercado ruso tras la invasión de Ucrania.
McDonald’s dijo que ponía en venta toda su cartera rusa de 850 restaurantes, en los que trabajan 62 mil personas, por la crisis humanitaria tras la invasión de Ucrania, que también ha provocado sanciones internacionales contra Rusia.
Pocos días después, la cadena estadounidense Starbucks, que había cerrado temporalmente sus 130 cafés en Rusia tras la invasión de Ucrania, anunció que dejaba definitivamente el país.
Asimismo, General Motors se está retirando de Rusia “debido a una serie de factores externos, incluidos los problemas de la cadena de suministro y otros asuntos que escapan al control de la empresa”, dijo un portavoz.
Al 8 de mayo, más de 280 grandes empresas con una presencia importante en Rusia habían anunciado su retirada según un inventario de la Universidad de Yale.
Nike y Renault decidieron salir finales de junio.
En julio, el fabricante de juguetes LEGO anunció su salida de Rusia mediante la ruptura del contrato que tenía con la empresa local Inventive Retail Group.
De igual manera, Ikea anunció primero el cierre temporal de las 17 tiendas Ikea en Rusia y el paro de producción en el país. Después, el 15 de agosto, finalizó también la venta en línea de productos Ikea.
Aún así, a diferencia de otras marcas, Ikea mantiene abiertos sus 14 centros comerciales en Rusia, con la marca “MEGA”, ya que la compañía dijo que quiere asegurarse de que las personas tengan acceso a los elementos básicos que necesitan, como ropa, comestibles y farmacias, pero evalúa continuamente la situación.
Por su parte, la compañía de reservas de viajes en línea Expedia cesó la venta de viajes hacia y desde Rusia, confirmó un portavoz de Expedia con Insider, y Adidas puso fin a su asociación con la Federación Rusa de Fútbol.
Se estima que en los próximos meses más empresas retiren sus actividades de ese país.