Las y los ministros de Relaciones Exteriores de Suecia y Finlandia sostuvieron conversaciones en la sede de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) sobre el inicio formal del proceso para unirse a la alianza militar.
Las negociaciones fueron encabezadas por la ministra sueca de Relaciones Exteriores, Ann Linde, y su homólogo finlandés, Pekka Haavisto, después de que Turquía, miembro de la OTAN, retiró la semana pasada sus objeciones a la adhesión.
Se esperaba que los embajadores de los 30 estados miembros de la OTAN firmen el martes los protocolos de adhesión de Suecia y Finlandia, lo que abrirá un período de varios meses para que los países de la alianza ratifiquen su membresía.
A raíz de la guerra en Ucrania, Suecia y Finlandia anunciaron en paralelo su intención de abandonar su estatus militar de no alineación y pasar a formar parte de la OTAN. Sin embargo, Turquía de inmediato advirtió que vetaba la adhesión de esos dos países.
Una cumbre de la OTAN respaldó la intención de Suecia y Finlandia, después de intensas rondas de diálogo con Turquía. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, acusó a Suecia y Finlandia de ofrecer refugio seguro a militantes kurdos a los que el Gobierno de Ankara considera “terroristas”.
Turquía exigió que los dos países levantaran los embargos de armas adoptados por la acción militar turca en Siria en 2019. Pese al visto bueno que dio en la cumbre de la OTAN, Erdogan mantuvo al resto de la Alianza en ascuas al afirmar que aún podía bloquear las intenciones de Suecia y Finlandia si esos dos países no cumplían las promesas formuladas.