Tailandia legalizó el cultivo y la posesión de marihuana a partir de este jueves, un sueño hecho realidad para la generación de fumadores de marihuana que envejece y recuerda la legendaria variedad Thai Stick.
El país es conocido por la potente variedad Thai Stick. Se seca la planta y se la ata a palitos. Muchos derivados se venden en el exterior.
El Gobierno advirtió que quienes fumen en público podrán ser castigados con multas del equivalente a 780 dólares y con hasta tres meses de cárcel.
Los extractos de marihuana, como el aceite, siguen siendo ilegales si contienen más de 0.2% de tetrahydrocannabinol, o THC, la sustancia química que actúa como estimulante.
El plan del Ministro de Salud Pública para distribuir un millón de plántulas de marihuana, a partir del viernes, se ha sumado a la impresión de que Tailandia se está convirtiendo en un país de las maravillas de la marihuana.
La decisión de la Administración de Drogas y Alimentos de eliminar toda la planta de la categoría de estupefacientes convierte a Tailandia en la primera nación de Asia en despenalizar la marihuana para uso médico e industrial.
En cambio, Uruguay y Canadá son los únicos países hasta ahora que han legalizado la marihuana recreativa a nivel nacional.