Poco a poco se restablece el suministro eléctrico en Estados Unidos, aunque persiste la falta de gas y agua potable por el congelamiento de tuberías.
Esto debido a las tormentas invernales de los últimos cuatro días, que han dejado al momento, por lo menos 36 muertos.
El gobierno del presidente, Joe Biden, declaró emergencia de salud pública en Texas para atender a las personas más afectadas.
En ese estado, 500 mil hogares permanecen sin electricidad.
Aún no estamos fuera de peligro. Todavía estamos en condiciones de mucho frío. Así que todavía estamos viendo una demanda invernal mucho más alta de lo normal”, dijo Bill Magness, dir. Consejo de Confiabilidad Eléctrica,Texas.
Las personas que se quedaron sin luz y calefacción optaron por usar leña, parrillas, sus coches para calentarse o acudieron a uno de los 300 refugios del estado.
Hacía demasiado frío para estar en casa, sin comida, sin agua. No podíamos cocinar, así que por eso vinimos aquí. Este es el refugio más cercano”, señaló Derrick Maxwell, habitante de Houston, Texas.
Louisiana, Mississippi, Alabama y Virginia Occidental reportan que 387 mil casas y negocios continúan sin energía.
El clima extremo también afectó los sistemas de agua.
Las autoridades texanas pidieron a 7 millones de personas hervir el agua para consumo porque la planta de tratamiento no opera con normalidad.
Les pido a todos los tejanos que continúen tomando las precauciones necesarias para mantenerse a salvo y abrigados”, sostuvo Greg Abbott, gobernador de Texas.
En los supermercados y restaurantes hay largas filas de quienes buscan alimentos y productos esenciales. Otros más tratan de comprar gas y garrafones de agua.
Los consulados de México en Mc Allen y Austin, en Texas, difundieron direcciones de albergues y bancos de alimentos, donde los paisanos pueden acudir si requieren ayuda. La tormenta de este jueves impactó en los estados de Connecticut, Nueva Jersey, Pennsylvania, Delaware, Arkansas, Tennessee, Carolina del Norte y Nueva York, en donde fueron cancelados al menos 200 vuelos.
¿Qué está pasando en Texas?
El frío helado, marcado por temperaturas polares y tormentas de nieve, provocó un aumento en el consumo de electricidad en los estados del sur de Estados Unidos en los últimos días.
Texas, que tiene casi 29 millones de habitantes, está experimentando las peores dificultades para satisfacer esta explosión de la demanda.
Varias centrales eléctricas que funcionan con gas natural, energía eólica o nuclear y que abastecen a ciudades como Austin o Houston sufrieron una interrupción en su funcionamiento por estas condiciones extremas.