Muchos barrios de Manila quedaron anegados tras el paso del tifón Vamco, el tercero que azota Filipinas en pocas semanas y que causó al menos un muerto en otras partes del archipiélago.
Vamco tocó tierra el miércoles por la noche en el este de la isla de Luzón, acompañado por vientos de 155 km/h.
El tifón se alejó del archipiélago por el oeste el jueves, y se dirige al Mar de China Meridional.
Las autoridades han advertido del riesgo de deslizamientos de tierra y de altas olas en la costa.
Con una población de 12 millones de habitantes, la capital Manila quedó paralizada en algunos barrios por las lluvias torrenciales. La situación también era complicada en varias provincias limítrofes.
Muchas zonas están anegadas. Hay muchos pedidos de ayuda” en la provincia, declaró Rouel Santos, de 53 años, un funcionario jubilado de los servicios de emergencia en la provincia de Rizal, cerca de Manila.
Santos explicó que las inundaciones le recordaron el paso en 2009 del tifón Ketsana, conocido en Filipinas como tormenta tropical Ondoy, que causó cientos de muertos.
- Un alto cargo de Protección Civil dijo que las precipitaciones provocadas por Vamco “se acercaban al volumen” de las de Ondoy, y estimó que las inundaciones podrían agravarse porque los cursos de agua ya están llenos.
En Marikina City, uno de los barrios más afectados de la capital, los miembros de la Cruz Roja de Filipinas utilizaban barcos para rescatar a las personas atrapadas en sus casas. En algunas calles el agua llegaba a la altura de la cintura.