Millones de estadounidenses sufrieron temperaturas escalofriantes, ventiscas, cortes de energía y reuniones festivas canceladas este viernes, debido a una tormenta invernal que, según los meteorólogos, casi no tiene precedentes en su alcance, exponiendo a alrededor de 60% de la población en Estados Unidos.
Más de 200 millones de personas estaban bajo algún tipo de aviso o advertencia de clima invernal este viernes, dijo el Servicio Meteorológico Estadounidense.
“El mapa del servicio meteorológico representa una de las mayores extensiones de advertencias y avisos de clima invernal de la historia”, dijeron los meteorólogos en un comunicado.
Además, más de 3 mil 400 vuelos dentro, hacia o desde Estados Unidos fueron cancelados, según el sitio de seguimiento FlightAware, lo que provocó más caos a medida que los viajeros intentaban llegar a casa para las vacaciones.
Asimismo, más de 458 mil hogares y negocios se quedaron sin electricidad este viernes.
Lo tormenta se entiende por las fronteras
La enorme tormenta se extendió de frontera a frontera. En Canadá, WestJet canceló todos los vuelos este viernes en el Aeropuerto Internacional Pearson de Toronto, a partir de las 09:00 horas.
Por otra parte, en México, los migrantes esperaron cerca de la frontera de Estados Unidos en temperaturas inusualmente frías, mientras esperan una decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos sobre si levantar las restricciones de la era de la pandemia.
“Esto no es como un día de nieve cuando eras niño. Esto es algo serio”, advirtió el presidente Joe Biden el jueves en la Oficina Oval después de una sesión informativa de funcionarios federales.
Ante esto, los meteorólogos esperan que se desarrolle un ciclón bomba, que es cuando la presión atmosférica cae muy rápidamente en una fuerte tormenta, cerca de los Grandes Lagos. Eso provocará condiciones de ventisca, incluidos fuertes vientos y nieve.
Aumenta demanda de refugios por el frío
El frío también provocó una gran demanda en los refugios para personas sin hogar, incluso en Detroit, donde algunos refugios estaban llenos el jueves.
“No enviaremos a nadie de regreso a este frío”, dijo Aisha Morrell-Ferguson, portavoz de COTS, un refugio solo para familias, al Detroit News.
En Portland, Oregón, los funcionarios abrieron cuatro refugios de emergencia. En el centro de la ciudad, Steven Venus intentó subirse a un tren ligero para escapar del frío después de acurrucarse en la acera durante la noche con temperaturas bajo cero .
Courtney Dodds, una vocera de Union Gospel Mission, dijo que los equipos de su organización habían estado saliendo para tratar de persuadir a las personas para que buscaran refugio.
“Puede ser muy fácil para las personas quedarse dormidas y terminar perdiendo la vida debido al clima frío“, señaló.
Mientras tanto, en el famoso y nevado Buffalo, en Nueva York, los meteorólogos predijeron una “tormenta única en una generación” debido a la fuerte nevada con efecto lago, ráfagas de viento de hasta 105 kilómetros por hora, apagones y la posibilidad de cortes de energía extensos.
El alcalde Byron Brown instó a la gente a quedarse en casa y la NHL pospuso el partido en casa de los Buffalo Sabres contra los Tampa Bay Lightning.
El área podría ver de dos a cuatro pies (0.6 a 1.2 metros) de nieve durante el fin de semana comentó el meteorólogo del Servicio Nacional de Meteorología, Richard Otto
Denver, que tampoco es ajeno a las tormentas de invierno, fue el más frío en 32 años, cuando la temperatura bajó a -31 grados Celsius por la mañana en el aeropuerto.