Ucrania acusó a Rusia de haber detenido a 15 rescatistas de un convoy de la Cruz Roja que intentaba llevar alimentos y medicinas al sitiado puerto de Mariúpol, atacado por aire y mar, y donde sobreviven sin agua ni electricidad, unas 100 mil personas. Siete mil pudieron salir en las últimas 24 horas.
Aparte, Rusia atacó Makariv, Kiev, Járkov y Chernihiv, entre otras localidades.
Asimismo, las tropas rusas destruyeron un laboratorio para la gestión de desechos radiactivos en la central nuclear de Chernóbil, ocupada al inicio de la invasión de Ucrania.
El laboratorio costó más de 6 millones de euros y se encontraba en la zona de exclusión de la central nuclear de Chernóbil y era un complejo con “importantes capacidades analíticas y de investigación” en el ámbito de la gestión de los desechos radiactivos.
De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), 10 millones de personas abandonaron sus lugares de origen desde el comienzo de la invasión el 24 de febrero.