Ucrania dijo que sus fuerzas habían repelido los ataques rusos a lo largo de la línea del frente en vísperas del aniversario de la guerra, mientras el presidente Vladimir Putin habló del arsenal nuclear de Rusia.
Después de una serie de discursos estridentes en el período previo al aniversario de su invasión, Putin anunció planes para desplegar nuevos misiles balísticos intercontinentales de múltiples ojivas Sarmat este año.
A principios de esta semana, suspendió la participación de Rusia en el tratado de control de armas nucleares START.
“Rusia prestaría mayor atención al fortalecimiento de la tríada nuclear”, dijo Putin en comentarios publicados por el Kremlin, refiriéndose a los misiles nucleares basados en tierra, mar y aire.
En tanto, Ucrania y sus aliados occidentales han restado importancia a la conversación nuclear como una distracción de una fallida campaña militar rusa sobre el terreno, un año después de que Putin lanzara la mayor guerra terrestre en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
En las últimas semanas, Rusia ha llevado a cabo ataques de infantería sobre suelo helado en batallas descritas por ambos bandos como las más sangrientas de la guerra.
En un parque de tanques ucraniano cerca de Bakhmut, la pequeña ciudad oriental que se ha convertido en el principal objetivo de Rusia, se escuchaban constantes explosiones resonando en la distancia.
Si renunciamos a Bakhmut, todo lo demás se complicará aún más. No podemos renunciar a ella, bajo ningún concepto. Aguantaremos. Estamos en el lugar por ahora y tratando de recuperar todo el territorio” dijo el sargento menor Oleh Slavin, un operador de tanques.
Captura de nuevos territorios
Funcionarios occidentales dijeron que Rusia había planeado una ofensiva para capturar nuevos territorios antes del aniversario, utilizando cientos de miles de reservistas reclutados en los últimos meses para darle a Putin una victoria que anunciar.
Las fuerzas de Moscú han hecho progresos tratando de rodear Bakhmut, pero no han logrado romper las líneas ucranianas hacia el norte cerca de Kremmina y hacia el sur en Vuhledar, donde han sufrido grandes pérdidas al atacar en campo abierto.
“Las fuerzas ucranianas repelieron 90 ataques rusos en el noreste y el este en las últimas 24 horas”, dijo el ejército este jueves.
Por su parte, el portavoz militar ucraniano, el general de Brigada, Oleksiy Gromov, indicó que Moscú estaba tratando de usar su ventaja de mano de obra para agotar las fuerzas de Kiev.