La Unión Europea (UE) concretó un acuerdo pionero que prohibirá importar productos que hayan contribuido a la deforestación, como el cacao, el café o la soja en ciertas regiones, en vísperas de la COP15 de la Biodiversidad en Canadá.
Otros productos que serán vetados son: el aceite de palma, la madera, la carne bovina y el caucho, además de varios derivados como el cuero, el chocolate, los muebles, el papel y el carbón vegetal.
El texto fue elaborado tras largas negociaciones entre el Parlamento Europeo y los 27 estados miembros de la UE.
“¡Se trata de una primicia mundial! Es el café del desayuno, el chocolate que comemos, el carbón de los asados, el papel de nuestros libros. Es radical”, celebró Pascal Canfin, presidente de la comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo.
Cambiar sus prácticas
Con la COP15 de Biodiversidad a las puertas, que se celebrará en Montreal del 7 al 19 de diciembre, la decisión de la UE no solo cambia las reglas del juego del consumo europeo, sino que incita enormemente a los otros países a cambiar sus prácticas, comentó Anke Schulmeister-Oldenhove, del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
“La UE es responsable de 16% de la deforestación mundial a través de sus importaciones (sobre todo de soja y de aceite de palma, según cifras de 2017) y el segundo mayor destructor de bosques tropicales detrás de China“, según WWF.
La importación de productos a la UE se prohibirá si estos proceden de tierras deforestadas después de diciembre de 2020.
Asimismo, las empresas importadoras, responsables de su cadena de suministro, deberán probar la trazabilidad mediante datos de geolocalización de los cultivos y fotos satelitales.
La presión judicial y social se hace sentir cada vez con más fuerza en Europa frente a los desafíos del cambio climático y la degradación ambiental.
En la mira de muchas acciones se hallan los productos procedentes de la selva amazónica, donde la deforestación, en la parte brasileña, tuvo un avance de 60% durante el mandato del presidente ultraderechista Jair Bolsonaro.
Ampliar el ámbito de aplicación
El texto aprobado fue propuesto en noviembre de 2021 por la Comisión Europea y asumido en términos generales por los sstados miembros, pero los eurodiputados votaron en septiembre para reforzarlo con la ampliación de productos afectados, al incluir el caucho.
El Parlamento Europeo también pidió ampliar el ámbito de aplicación de la normativa a otros ecosistemas amenazados, como la sabana del Cerrado (Brasil, Paraguay, Bolivia), de donde procede gran parte de las importaciones de soja de la UE.
Pero el acuerdo estipula que la ampliación del ámbito de aplicación tendrá que plantearse como muy tarde un año después de que el texto entre en vigor.
Además, la Comisión deberá estudiar una posible extensión a otros productos al cabo de dos años, como el maíz, a otros ecosistemas ricos en almacenamiento de carbono y biodiversidad, como las turberas, y también al sector financiero, otro reclamo del legislativo comunitario.