En Nueva York la venta de marihuana para consumo recreativo ya es legal y oficial. El estado otorgó las primeras 36 licencias para comercializar cannabis y se perfila como la capital de un negocio formal multimillonario en Estados Unidos.
“Es un momento monumental para Nueva York. Tenemos 36 licencias, o al menos adjudicatarios en este momento que estarán a la vanguardia de la venta legal de cannabis”, dijo Michael James, abogado pro marihuana.
Las hojas de la planta ya se vendían, aunque de manera clandestina.
“Los dispensarios que vemos ahora no son en realidad dispensarios autorizados. Y las ventas que hemos visto, no son ventas legales”, agregó.
No todos los solicitantes cumplieron los requisitos de la oficina de gestión de cannabis neoyorquina, así que nuevos dispensarios minoristas de uso condicional para adultos, que es su denominación, deberán esperar hasta algún momento de 2023.
El valor del negocio, sólo en Nueva York, llegaría a cuatro mil 200 millones de dólares hacia 2027, generando un impacto económico total superior a diez mil millones y 76 mil empleos.
El gobierno del estado de Nueva York estima que esa actividad generará más de mil 250 millones de dólares en ingresos por impuestos durante los próximos seis años.
Sin embargo, vender cannabis en sitios no autorizados, seguirá siendo penado.
“No querían perpetuar el mismo sistema que nos atrapó. En este lugar con los aspectos criminales. Hemos visto incautaciones de camiones y productos. Y creo que veremos más de eso en los próximos meses”, concluyó Michael james.
Eso sí, advierte la autoridad que los dispensarios ilegales sancionados no tendrán posibilidad de obtener permiso alguno.