En Tapachula, Chiapas, una nueva caravana llamada “Viacrucis Migrante” inició su caminata rumbo a Ciudad de México para exigir al Gobierno federal que les permita transitar por el país, para llegar a la frontera con Estados Unidos.
Portando una cruz de madera y una manta con la leyenda “asesino de migrantes pobres“, el contingente de unas 2 mil personas, procedentes de centro, Suramérica y el Caribe, se concentró en el Parque Bicentenario de Tapachula.
Esta caravana es la segunda que se conforma este año desde el sur de México, y se da a pocos días de que la Ley SB4 de Texas busca establecer sus propias normas para regular la inmigración, las cuales quedara momentáneamente suspendida por la justicia de Estados Unidos.
Las personas migrantes de una veintena de nacionalidades que participan de la caravana, tendrán como primera parada la comunidad de Álvaro Obregón, a unos 18 kilómetros de Tapachula, donde planean pernoctar para continuar su viaje las primeras horas de este martes 26 de marzo.
De acuerdo con los organizadores, la caravana no está integrada por criminales, sino por gente trabajadora, honesta, que se quiere ganar la vida a través del trabajo.
Para autoridades religiosas que acompañan el nuevo “Viacrucis Migrante”, las miles de personas que viajan en condición de migrantes, viven un verdadero viacrucis en su travesía hacia una vida mejor, caminando cientos de kilómetros, sufriendo violaciones a derechos y sorteando múltiples peligros.
Dijeron que en la práctica se sigue extorsionando, abusando, robando a los migrantes, de una manera directa o indirecta.
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