La caravana autodenominada “Éxodo de la Pobreza“ e integrada por entre siete mil y 10 mil migrantes originarios de 24 naciones, continúa su avance por territorio nacional.
Tras recorrer ya más de 72 kilómetros a pie, el contingente se detuvo este miércoles en el municipio de Escuintla, Chiapas, para atender problemas de salud de sus integrantes.
Y es que, desde que la caravana migrante inició su recorrido, el pasado 24 de diciembre en Tapachula, en la frontera de México con Guatemala, las personas han presentado cansancio, deshidratación y heridas en los pies.
Sin embargo, aseguran que nada los detendrá en su camino al “sueño americano”.
“Nosotros sólo queremos trabajar, yo no pido y nunca he pedido nada regalado. Lo que haga el Gobierno de Estados Unidos, y México, yo sé que no será para nada bueno para nosotros, pero vamos para allá con la esperanza de qué Dios allá nos tendrá algo diferente, porque él es el que abre los caminos, el que abre y cierra puertas”, dijo Maynor Estuardo, migrante de Guatemala.
Las caravanas migrantes en México
Se espera que la mañana de este jueves continúen avanzando por la costa chiapaneca hasta Mapastecec.
“Porque Estados Unidos tiene sanciones contra Venezuela, entonces ok, el Gobierno es tirano, Estados Unidos le mete sanciones, dígame usted por qué no vamos a migrar, es obligado, nos obligan a exiliar”, señaló el migrante de Venezuela, Jesús Ramón Silva.
En tanto la caravana “Latinoamérica-Unida”, integrada por casi 400 migrantes centroamericanos, llegó a Ixtaczoquitlán, luego de que estuvieron varados dos días en Córdoba, Veracruz, por no poder abordar los trenes de carga Ferrosur.
Cabe recordar que la primera caravana masiva de migrantes se llevó a cabo en octubre del 2018, en aquella ocasión viajaron cerca de diez mil personas originarias de Guatemala, El Salvador y Honduras.
Desde entonces, esta forma de migración se ha sido una práctica constante, debido a la inseguridad y delincuencia organizada que enfrentan los migrantes durante la travesía. Y también a grupos que las organizan desde sus países de origen.
En el 2019, llegaron tres caravanas a México, la primera en enero con un contingente de casi dos mil personas; la segunda en abril con cerca de tres mil migrantes y la tercera en octubre con dos mil migrantes, en todos los casos la mayoría de origen centroamericano, cubanos, haitianos y africanos.
En enero del 2020, cerca de tres mil migrantes intentaron cruzar por el río Suchiate y otras rutas, para evadir los centros migratorios.
En octubre de 2021, cerca de 4 mil migrantes encabezaron la llamada “caravana madre”.
Y previo a la actual caravana, en octubre de este año salió del municipio de Tapachula un contingente de cuatro mil migrantes.
Activistas de organizaciones sociales hacen un llamado a México y Estados Unidos, para que se respeten los derechos humanos de los extranjeros durante su camino, pero, sobre todo, para que se atiendan las causas.
“Creemos que tiene que haber un razonamiento y una razón humana, para mitigar esta problemática, que es este éxodo de la pobreza”, puntualizó Luis García Villagrán, activista del Centro de Dignificación Humana.