Miles de personas marcharon este domingo en Sinaloa para demandar a las autoridades la garantía de la paz en el estado, afectado por enfrentamientos entre facciones del Cártel de Sinaloa.
Los manifestantes, vestidos de blanco y portando pancartas con mensajes como “Queremos seguridad para vivir en paz” y “Quiero salir sin miedo“, recorrieron las calles hasta llegar al Palacio de Gobierno.
Una vez ahí, exigieron la destitución del gobernador Rubén Rocha Moya, a quien responsabilizan por la falta de acciones contundentes para frenar la violencia.
Desde septiembre, los enfrentamientos entre “Los Chapitos” y “Los Mayitos” han generado una ola de violencia que ha dejado más de 700 personas asesinadas, convirtiendo a Sinaloa en un epicentro de conflicto armado.
La Iglesia Católica alza la voz
En su editorial semanal Desde la Fe, la Iglesia Católica se sumó al llamado de la ciudadanía, destacando el impacto de la violencia en las infancias.
“Con los niños no, porque ellos merecen esperanza”, señaló el órgano informativo de la iglesia, enfatizando la necesidad de entornos seguros para las niñas y los niños, quienes también son víctimas indirectas de los actos criminales.
Exigencia de justicia
El ambiente de inseguridad ha generado temor entre las comunidades y una creciente frustración ante la falta de resultados de las estrategias gubernamentales para combatir al crimen organizado.
Las demandas de la población incluyen medidas concretas que frenen la violencia y prioricen la protección de los más vulnerables.
El Gobierno de Sinaloa, encabezado por Rocha Moya, no ha emitido un pronunciamiento oficial tras la manifestación.