La Comisión Nacional de los Derechos Humanos saludó la resolución del Primer Tribunal Colegiado del Vigésimo Circuito en Chiapas, que concede el amparo al defensor indígena Mariano Pérez, para obtener su libertad tras 17 años 7 meses y 12 días injustamente interno en el Centro Penitenciario número 5 de San Cristóbal de las Casas.
El organismo nacional afirmó que la excarcelación de Mariano Pérez pone al descubierto la necesidad de revisar todos aquellos casos, principalmente de indígenas, privados injustamente de su libertad.
Ya que de no hacerlo, dijo, el Estado Mexicano se convierte en cómplice de seguir alimentando el ciclo de impunidad que a la fecha no se logrado erradicar, vulnerando a los grupos en mayor situación de vulnerabilidad en nuestro país.
La CNDH recordó que Pérez Velasco, quien junto con 13 personas privadas de la libertad se había pronunciado en huelga de hambre desde el 15 de marzo de 2019, en protesta por su encarcelamiento y por haber sido víctimas de tratos crueles, inhumanos y degradantes durante su detención, incluso actos de tortura para obtener su confesión.
Sostuvo que el defensor indígena fue detenido de manera ilegal con uso excesivo de la fuerza y obligado a confesar haber cometido el delito de privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro por parte de policías judiciales pertenecientes a la entonces procuraduría de justicia del estado de Chiapas.
Durante el proceso que se le siguió, agregó, no se presentó la parte acusadora ni fue informado de la celebración de audiencias, y permaneció varios años sin que se le dictara sentencia.
En este contexto, la CNDH señaló que la excarcelación de Mariano, alerta de la necesidad de revisar de manera urgente todos aquellos casos en los que las personas indígenas privadas de la libertad se encuentran internas en algún centro penitenciario del país en espera de una sentencia, o bien sentenciados de manera injusta.
Ello, porque se les han vulnerado sus derechos al debido proceso, a una defensa adecuada y el acceso a la justicia, en razón de su origen étnico, por ser defensoras de derechos humanos, por sus opiniones, sus creencias y sus costumbres, entre otras garantías constitucionales.