La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación a la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, y al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat.
Lo anterior, por las violaciones graves a derechos humanos ocurridas durante los hechos violentos que derivaron en el linchamiento de 15 personas en el municipio de San Mateo del Mar, en junio de 2020.
La CNDH pone de relieve que derivado de una queja y las investigaciones realizadas del caso, constató violaciones graves a los derechos humanos a la vida, a la libertad, a la integridad y seguridad personal, así como al principio del interés superior de la niñez, durante dichos acontecimientos.
Recordó que el 21 de junio de 2020, varias personas de San Mateo, que previamente tomaron las instalaciones de la agencia municipal, habían sido linchadas por habitantes de Huazantlán del Río.
Esto, denunciando que integrantes de la Guardia Nacional (GN) y de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, que se encontraban presentes al momento de los hechos, nunca intervinieron para tratar de frenar los hechos de violencia.
Además, la CNDH detalla que a las 12 horas, del 21 de junio de 2020, cinco personas de Huazantlán fueron heridas por arma de fuego en la carretera, a la altura de la colonia Reforma.
Ante ello, la mesa o grupo de coordinación estatal para la Construcción de la Paz envío a 55 elementos de seguridad pertenecientes a las policías estatal y vial, a la Guardia Nacional, así como a la Policía Ministerial, para custodiar a los heridos.
Asimismo, indicó que al pasar por Huazantlán del Río, las personas del filtro de seguridad únicamente permitieron la salida de las ambulancias e hicieron que el contingente policial regresara a San Mateo para trasladar a Huazantlán a 200 personas que viajaban en camionetas.
Al llegar a dicha localidad, agregó, estas personas ingresaron a la agencia municipal y sacaron de manera violenta a más de 30 personas que habían tomado dichas instalaciones, quienes fueron agredidas por la turba.
La CNDH precisó que un total de 15 personas fueron golpeadas con tabiques de concreto, cercenadas sus extremidades, quemadas con gasolina y fallecieron alrededor de las 21:00 horas.
Ante este tipo de acontecimientos, el organismo nacional llamó a una actuación inmediata y urgente, por parte de las autoridades responsables, dado el alto riesgo para la seguridad y estabilidad sociopolítica en la región.
“Debieron convocar a las autoridades en materia de seguridad pública, a fin de atender dicho evento en un tiempo estimado entre 30 y 60 minutos, además de que no se dio seguimiento a las solicitudes, ni se realizaron los patrullajes y presencia, para disuadir a los agresores”, señaló.
Por ello, la Comisión solicitó a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y al Gobierno del estado reparar integralmente el daño causado a las víctimas indirectas de los fallecimientos y a las víctimas sobrevivientes, incluyendo el pago de una compensación justa y suficiente, entre otros puntos.