Con un exhorto a la Fiscalía del estado de Veracruz a reabrir las investigaciones sobre la violación y asesinato de Ernestina Ascencio Rosario, indígena de Zongólica, en febrero de 2007, presuntamente a manos de militares, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) anunció el inicio de la queja para revisar el expediente.
La ombudspersonal nacional señaló que ante la persistencia de dudas, pese al cierre del caso decretado por las autoridades del estado, el organismo nacional considera pertinente revisar su propia actuación, así como analizar las presuntas violaciones al derecho a la libertad sexual, bajo una perspectiva de género.
Además, la CNDH afirmó que producto de un proceso de revisión exhaustiva de varios procedimientos, ha llegado a la convicción de que es tiempo de avanzar y generar un proceso de colaboración y coordinación interinstitucional en favor de garantizar los derechos de las personas en situación de víctimas.
Asimismo, sostuvo que es de fundamental importancia no dejar lugar a dudas de quienes resulten responsables de las irregularidades señaladas; garantizar los derechos de debido proceso y seguridad jurídica de las personas; reparar el daño a las víctimas directas e indirectas; garantizar la no repetición de este tipo de delitos e instalar un mecanismo ciudadano de seguimiento al cumplimento de la no repetición de estos delitos.
En virtud de ello, la CNDH exhorta públicamente a la Fiscalía General del estado de Veracruz gire instrucciones para que su unidad especializada en asuntos indígenas y derechos humanos reabra la investigación con las consecuencias legales que corresponden y se facilitan los procesos de memoria, verdad, justicia y reparación.
Cabe recordar que el 25 de febrero de 2007, Ernestina Ascencio Rosario, de 73 años de edad, fue encontrada sin vida.
De acuerdo al Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro fue violada tumultuariamente por elementos castrenses, al parecer, pertenecientes al 63 batallón de infantería de la 26 zona militar de lencero.
Sin embargo, el ejército se deslindó de las inculpaciones.
El parte oficial forense declaró que la causa del deceso de Ernestina Ascencio Rosario había sido anemia y la entonces Procuraduría del Estado cerró el caso.