Alonso Romero, maestro en finanzas y mercados energéticos, destacó la importancia de que Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se conviertan en “empresas públicas del Estado”.
Y es que con la reforma en materia energética, que está en discusión en el Congreso, se revierte la que se aprobó en diciembre de 2013, en el sexenio de Enrique Peña Nieto, por lo que se recupera la soberanía energética.
En el noticiario Punto de Referencia de El Once, Alonso Romero explicó que tanto CFE como Pemex serán más productivas y eficientes de lo que son ahora.
“Este tema de empresas productivas del Estado, cuando se aprobó la reforma en el 2013, se les puso ese nombre, pero nunca se definió exactamente qué eran, por lo que CFE o Pemex se quedaron en un limbo en el que tenían que actuar como empresas privadas, pero se expusieron una serie de reglas que las limitaban demasiado y las separaron en muchos pedazos”, dijo.
Agregó que eso provocó que aumentaran los costos de operación de manera muy importante.
En la CFE por ejemplo, dijo, cuando se implementó la reforma de Peña Nieto, los subsidios a las tarifas eléctricas que pagaban los usuarios pasaron de ser cerca de 9 mil millones de pesos al año, a 70 mil millones de pesos al año, por las ineficiencias de la misma reforma.
“Ahora bien, si ese se revierte y se vuelve una empresa pública, va a permitir que las ineficiencias se eliminen y se ahorre una serie de sobrecostos que se generan. De ahí se tendrá una empresa que se pueda coordinar entre todas sus áreas”, mencionó.
En el caso de Pemex, agregó, Peña Nieto la entregó “con una deuda monumental” que se ha ido disminuyendo en los últimos 6 años, ya que era la petrolera más endeudada del mundo.
Al volverse una empresa pública otra vez, la deuda se reducirá en gran medida.
“Lo que ya no se pague de deuda ahora va a liberarse como flujo para nuevas inversiones y se va a potenciar otra vez el tema de la refinación, porque se van a poder coordinar de nuevo las áreas de Pemex, y el tema de la logística. Hacerlas de nuevo unas empresas coordinadas (a Pemex y CFE), repercutirá en costos de electricidad y combustibles más bajos”, aseguró.
El entrevistado dijo que los lugares o países del mundo donde cuentan con este tipo de empresas públicas fuertes, “tienen precios muchísimo más bajos que donde no las hay; tienen 40% de precios de energías más bajos”.
CFE y Pemex, mayor productividad
Asimismo, enfatizó que la CFE es el mayor productor de energía eléctrica limpia de este país, y lo ha sido durante toda la historia.
“Actualmente contribuye con un poco más de la mitad de toda la energía limpia que se produce en México, y lo hace a través de la energía nuclear, hidroeléctrica y de la geotermia”, agregó.
Por su parte, Pemex tiene un plan muy ambicioso de sustentabilidad y descarbonización.
Finalmente indicó que dentro de la reforma que se discute en la Cámara de Diputados, se pretende tener una planeación del sistema energético más fuerte, lo cual también le dará mayor certidumbre a las inversiones.