Esta semana se conmemoró el Día Internacional de la Mujer, aunque cada año se hace un balance del avance en materia de derechos humanos y de la participación igualitaria de las mujeres en la vida social, económica, política y cultural del país, es necesario hacer una revisión con tiempos o periodos más cortos para que podamos, en primer lugar, saber dónde en verdad estamos parados en esta materia y en segunda, que no sea cada año cuando se trate el tema y que no se utilice el día solo como datos y estadísticas.
Los resultados de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) del Inegi, indican que 66 de cada 100 mujeres de 15 años o más de edad que viven en el país han sufrido al menos un incidente de violencia de cualquier tipo a lo largo de la vida. Pero vayamos por partes. México ha tenido un gran avance en materia de género en los últimos años.
Pero vayamos por partes. México ha tenido un gran avance en materia de género en los últimos años y así lo señala un estudio publicado por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República sobre las “Iniciativas legislativas a favor de los derechos de las mujeres y la igualdad de género en las LXII y LXIII Legislaturas” de 2018.
Dicho estudio señala que la participación política de las mujeres en México, expresada en la ocupación de cargos públicos, es relativamente reciente y se asocia directamente con el derecho a votar, y ser votadas para puestos de elección que se reconoció a mediados del siglo XX, más específicamente el 17 de octubre de 1953 fue cando se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el decreto que reconoce el sufragio femenino.
“El derecho de las mujeres a votar y ser electas a cargos de elección popular hizo posible su inclusión a espacios antes vetados como las diputaciones y las senadurías. Sin embargo, este proceso fue lento, las cifras indican que entre 1964 y 1999 sólo 14.6% de las personas que ocuparon un escaño en el Senado de la República fueron mujeres y el restante 85.4% fueron varones”, indica el estudio.
Asimismo, las cuotas de género se establecieron a partir de 1993. En 1996 se estableció que los partidos no podían postular a más de 70% de candidaturas de un mismo sexo, pero sin sanción alguna para los partidos que incumplieran de dicha norma. Para 2002, las disposiciones se ampliaron y las cuotas de género se hicieron obligatorias.
En 2008 se llevó a cabo una nueva reforma al entonces Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (COFIPE) para ampliar el umbral que los partidos políticos deben destinar a las candidaturas de mujeres, pasando de 30 a 40% y se incorporaron señalamientos para que los partidos políticos destinaran anualmente 2% de su financiamiento público para el desarrollo del liderazgo político de las mujeres.
Así, para 2012, las candidaturas al Congreso de la Unión gracias a una gran lucha de las mujeres lograron que la cuota de género se estipulara con 40% de mujeres y 60% de candidatos varones.
En 2014 se dio el tránsito de las cuotas de género al principio de paridad elevándose a rango Constitucional con la reforma al Artículo 41 de la CPEUM.
Esto nos lleva a un avance significativo, pero lento en el panorama legislativo en cuanto a paridad, en torno a la presencia de mujeres en el Poder Legislativo.
Iniciativas de ley sobre derechos de las mujeres e igualdad de género
Durante la LXII y LXIII Legislatura se presentaron 2 mil 312 iniciativas de las cuales mil 179 (51%) corresponde a la LXII y mil 133 (49%) a la LXIII Legislatura).
En materia de derechos humanos de las mujeres y la igualdad de género, en la LXII Legislatura se identificaron 76 iniciativas para crear nuevas leyes o modificar normas existentes.
Estas iniciativas representan 6.4% del total de los proyectos de ley propuestos por las y los senadores durante los tres años de trabajo legislativo. De estas, 76 iniciativas, 28 (33%) se turnaron para su análisis y elaboración de dictamen respectivo a la Comisión de Igualdad de Género, mientras que los 48 proyectos restantes se enviaron a otras comisiones con iguales propósitos.
Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia
Para la LXIV Legislatura del Congreso de la Unión, llamada “Legislatura de la Paridad”, con respecto a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia se tiene el registro de 185 iniciativas, pero de ellas 153 se encuentran pendientes de legislar y solo seis han sido aprobadas y publicadas en el Diario Oficial de la Federación.
El panorama no cambia mucho en congresos locales, tal es el caso del Congreso de la Ciudad de México que en su balance legislativo en materia de derechos humanos de las mujeres del 2019 señala que “en términos numéricos, se puede observar que de las 465 iniciativas que se han presentado en total en el Congreso, durante el periodo que se analiza (septiembre-diciembre de 2019), 130 de ellas han abordado temas relacionados a las mujeres. El número es significativo, corresponde a 28% del total de iniciativas promovidas.
En relación con los Puntos de Acuerdo se presenta el siguiente estado: De los 353 instrumentos que se tienen registro en el periodo de análisis, 46 se han presentado para atender algún asunto sobre derechos de las mujeres, esto representa 13% respecto al total.
En el caso de los dictámenes aprobados, si se considera el total de iniciativas presentadas sobre derechos de las mujeres (128), se tiene que de éstas existen 23 dictámenes aprobados, lo que corresponde a 18% del total de iniciativas promovidas.
Como se observa en los datos anteriores, cinco de estos dictámenes estuvieron relacionados con buscar garantizar el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia y tres con derechos políticos.
“La 65 Legislatura es conocida también como la Legislatura de la Paridad, al contar con el mismo número de mujeres que de hombres, siendo ésta la primera con esta característica en la historia de la Cámara de Diputados. Sin embargo, a pesar de estos avances, el camino hacia el pleno reconocimiento de los derechos de las mujeres, aún no se refleja en la vida diaria”, señaló en un comunicado la bancada del Partido Acción Nacional (PAN).
“Las mujeres siguen siendo las principales encargadas del cuidado de niñas y niños, y suelen tener menores salarios y trabajos más precarios. Las desigualdades salariales y la carga de trabajo, y de cuidados al interior de los hogares, afectan principalmente a las mujeres”, agregó la bancada panista.
Por su parte, la diputada María Rosete Sánchez del Partido del Trabajo en San Lázaro señaló que “México es uno de los 25 países más peligrosos del mundo para las mujeres defensoras de derechos humanos, pues comúnmente son víctimas de detenciones arbitrarias, tortura, desaparición forzada, hostigamiento y ejecuciones extrajudiciales”.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, la legisladora resaltó la importancia de las personas que defienden los derechos humanos.
“Quienes contribuyen con su labor a la defensa y fortalecimiento de la democracia, a pesar de que viven constantemente hostigamiento y malos tratos”, mencionó.
Además, expuso que en el caso específico de las mujeres defensoras el riesgo es doble, ya que “padecen obstáculos adicionales debido a su género, al ser víctimas de estigmatización, al estar expuestas a comentarios de contenido sexista o misógino, o sufrir el hecho de que las denuncias presentadas por ellas no sean asumidas con seriedad”.
Mientras tanto, Ignacio Mier Velazco, legislador por Morena, hizo un reconocimiento a las legisladoras que integran su bancada, ya que pese a todo y contra todo han defendido sus ideales a favor de una mejor vida, derechos y bienestar de las mujeres.
“Les quiero expresar mi amplio reconocimiento por empujar desde la Cámara de Diputados las reformas que han permitido a las mujeres una mejor calidad de vida en todos los sentidos. Pese a todo han mantenido firme el propósito de encabezar el movimiento feminista en el Congreso y compartir los cimientos de la Cuarta Transformación. Son diputadas feministas, incluyentes y revolucionarias”, indicó.
De acuerdo al Instituto Nacional de la Mujeres (Inmujeres) en un estudio de “Las mujeres en la legislatura de la paridad del 2019 señala que “México el camino recorrido para lograr el reconocimiento de los derechos políticos y ciudadanos de las mujeres ha sido arduo y largo, desde el derecho a votar y a ser votadas en 1953, la posterior implementación del sistema de cuotas de género y la reforma paritaria de 2014, han sido grandes avances que permitieron la participación de las mujeres en los lugares de toma de decisiones en el Poder Legislativo, lo cual ha incidido de manera positiva en la conformación de la actual legislatura de la paridad“.
Para que las mujeres participen en igualdad de condiciones se ha dado el primer paso, ahora los retos estriban en realizar diversos los cambios normativos y reformas legislativas secundarias, así como los cambios que procuren la redistribución del trabajo doméstico y de cuidados no remunerado, encontrar la vía para conciliar la vida laboral y la vida privada.
“El avance en paridad ha sido grande y altamente reconocido a nivel internacional, el gran reto es terminar con la cultura de la discriminación, aún existente, las mujeres han llegado para participar de manera paritaria con los hombres. La participación política de las mujeres es un elemento que fortalece la democracia del país y permite la transformación de este”, señala el estudio del Inmujeres.