Gobernadores y gobernadoras de la Cuarta Transformación (4T) compararon la solicitud del dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, de destruir los Libros de Texto Gratuitos, con las acciones que realizaron el siglo pasado los dictadores Adolf Hitler y Augusto Pinochet.
A través de un comunicado conjunto, las y los gobernadores dijeron que este tipo de solicitudes, hechas por Marko Cortés en un programa de radio, sobre destruir los Libros de Texto Gratuitos, muestra a la derecha conservadora como retrógrada.
“En pleno arranque del siglo XXI, estas fueron las palabras de Marko Cortés en la entrevista con Ciro Gómez por la mañana: ‘la propuesta es que los padres de familia destruyan los libros en su totalidad… o una parte de ellos’”, citaron los miembros de la 4T.
Aseguraron que no se podía esperar mucho de la “derecha conservadora del país”, y llegó el momento en el que se descubren como retrogradas.
“Se desenmascaran y quedan evidenciados como los retrógradas que son; hoy en un programa de radio, el dirigente nacional del PAN propuso la destrucción de libros ante el inicio de su distribución para todas las escuelas primarias del país. Bien vale la pena recordarles que esa actitud de destrucción de libros fue impulsada y llevada a cabo por los personajes más siniestros de la historia reciente de la humanidad. Adolfo Hitler mandó a quemar libros hace 90 años; el dictador Pinochet en Chile hizo lo mismo”, señalaron gobernadores y gobernadoras de la Cuarta Transformación.
Apuntaron que no sólo quieren que la gente pase por alto aquellos pasajes nefastos de la historia, sino también, pretenden ignorar el papel trascendental de los Libros de Texto Gratuitos para la niñez mexicana.
“Los voceros de la derecha se oponen al desarrollo integral de niñas y niños desde el conocimiento científico, histórico, cultural y humanístico. Quieren olvidar que el libro de texto gratuito es de los instrumentos más importantes de maestras y profesores para llevar a cabo la educación de nuestros hijos e hijas”, insistieron.
Además, calificaron como “pretextos banales y faltos de argumentos convincentes” los motivos que tiene la oposición para que se distribuyan los libros.
Acusaron que el pueblo educado y bien informado ya no será susceptible de engaños ni podrá ser manipulado, por lo que “ya no podrán retenerlo eternamente en la ignorancia para ser explotado”.
Incluso dijeron que su postura oculta otra verdad, que es que se les acabó el negocio de impresión de libros que tenían en el anterior régimen y que les permitía corromper su producción al mejor postor.
“Las gobernadoras, gobernadores y el jefe de gobierno, nos pronunciamos en apoyo a la distribución del libro de texto en todas las primarias del país, por el futuro promisorio de nuestra niñez ¡que nadie se quede sin sus libros!”, concluyeron.