
El Congreso de Hidalgo prohibió las mal llamadas “terapias de conversión”, por lo que ahora es la onceava entidad que sanciona estas prácticas que buscan modificar la orientación sexual e identidad de género de las personas.
Con 24 votos a favor, el Congreso aprobó el dictamen que reforma el Código Penal y la Ley de Salud estatales para prohibir las llamadas ECOSIG (Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual e identidad de Género).
Tras la determinación, se castigará esta práctica con hasta 3 años en prisión.
“No hay nada qué curar. Estos métodos o tratamientos psicológicos y psiquiátricos obstaculizan y menoscaban la expresión de identidad de género, y la orientación sexual de la persona, pues se emplea violencia física y psicológica”, dijo el diputado de la comunidad LGBTIQ+, Luis Ángel Tenorio Cruz.
La reforma avalada se aplicó al Artículo 202 del Código Penal y la adición de un segundo y un tercer párrafo al Artículo 142 sexties, de la Ley de Salud para el estado de Hidalgo, para frenar los tratamientos ECOGIG.
Se sancionará de uno a tres años de prisión a quien promueva, imparta, aplique, obligue o finanse cualquier tratamiento, terapia, servicio o práctica que tenga por objetivo obstaculizar o modificar la orientación sexual, identidad o expresión de género de las personas”
Las sanciones serán del doble cuando las terapias de conversión se realicen contra personas menores de 18 años, adultos mayores o personas que no cuenten con la capacidad de comprender el hecho.