El Tren Maya no va a afectar cenotes y ríos submarinos, es una invención de quienes representan intereses relacionados con empresas y hasta un gobierno extranjero, para evitar la construcción de esta infraestructura que beneficiará al sur sureste del país, afirmó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
En su conferencia matutina de hoy, en Isla Mujeres, Quintana Roo, el presidente defendió la obra del Tren Maya de quienes, con amparos, representan, dijo, intereses alejados a los de las comunidades por las que pasa su trazo, cuyos campesinos y ejidatarios han ofrecido testimonios en el que alertan de esta situación y manifiestan un claro apoyo a favor del medio de transporte.
El primer mandatario reiteró que las vías del tren, en el caso del Tramo 5, pasarán por espaldares, y no por la carretera –que va más pegada a la costa–, precisamente para evitar afectaciones a sistemas de cenotes y ríos subterráneos.
Denunció que, en el caso del tramo cercano a la ciudad de Mérida, Yucatán, hay empresas inmobiliarias que buscan encarecer precios de los terrenos, aprovechando la presión del tiempo. Ante ello, expresó que se hará valer el recurso de la expropiación por utilidad pública, con lo que se garantiza el pago a precio comercial.
López Obrador enfatizó que el Tren Maya es una obra relevante, con la creación de 105 mil empleos e inversión de alrededor de 280 mil millones de pesos. Nunca en la historia del sureste se había llevado a cabo una obra así y es importante porque toda la gente que llega a Cancún, Tulum, va a poder conocer el caribe, la selva, y zonas culturales y arqueológicas de nivel mundial, expuso.
Añadió que a lo largo del camino del tren se tienen previstas obras e infraestructura que benefician al medio ambiente, como el Parque Jaguar, uno más de dos mil hectáreas en Uxmal y ampliación de la reserva ecológica en Calakmul, en 10 mil hectáreas.
El primer mandatario adelantó que el próximo lunes sostendrá una reunión de trabajo con representantes de la empresa Alstom y Bombardier para revisar la construcción de trenes que se llevará a cabo en Ciudad Sahagún, Hidalgo, bajo un contrato de 50 mil millones de pesos.