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Delitos sexuales contra menores ya no prescribirán

Una enmienda trascendental al Código Penal Federal de México ha sido publicada en el Diario Oficial de la Federación.

El miércoles, se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) una reforma al Código Penal Federal de México. Esta enmienda tiene el propósito de que los delitos sexuales perpetrados contra individuos menores de 18 años sean considerados imprescriptibles.

La reforma establece que la prescripción de un delito cometido contra un menor de edad empieza a contar desde que la víctima cumple la mayoría de edad. Sin embargo, esta normativa presenta una excepción para los delitos estipulados en los artículos 200, 201, 202, 203, 203 Bis, 204 y 209 Bis, relacionados con la pornografía, la corrupción de menores, el turismo sexual, el lenocinio y la pederastia. En estos casos, no habrá límite temporal para la persecución del delito.

El texto del decreto establece que para quien cometa el delito de abuso sexual contra un menor de dieciocho años, o contra una persona que no tenga la capacidad de comprender el acto o no pueda resistirlo, se impondrá una pena de seis a trece años de prisión, además de una multa de hasta quinientos días.

Además, si la persona responsable del delito es un servidor público, un ministro de culto religioso o similar, se le aplicará no solo la pena correspondiente, sino también la destitución y la inhabilitación para ocupar cargos públicos por un periodo igual a la pena impuesta.

El decreto también actualiza la referencia a la Ley para prevenir y sancionar la Trata de Personas, denominándola ahora como “Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas de estos Delitos”.

La reforma subraya que el propósito de estas modificaciones es asegurar que la persecución de estos delitos se lleve a cabo sin importar cuánto tiempo haya transcurrido, con el fin de eliminar la impunidad.

Se destaca que los delitos sexuales contra menores son actos ilícitos que atentan gravemente contra la integridad de las víctimas y cuyas consecuencias son tan complejas que dificultan la obtención de estadísticas precisas sobre su incidencia.

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