Gratuita y obligatoria, así será la educación superior en todo el país a partir del próximo Ciclo Escolar 2022-2023.
Esto lo determinó el Pleno del Senado al avalar el dictamen que expide la Ley General de Educación Superior y abroga la Ley para la Coordinación de la Educación Superior, vigente desde hace más de 40 años.
Esta es una ley que va a regular para bien la educación superior y, seguramente, será un instrumento que le permita elevar sus estándares de calidad”, dijo Rubén Rocha Moya, presidente de la Comisión de Educación en el Senado.
Garantiza la autonomía universitaria y reivindica la rectoría del Estado en materia educativa.
De hecho, la educación superior será considerada un bien público.
Es histórica esta reforma, pues dejaremos la herencia para el valor más grande que tiene un país: profesionistas”, comentó Miguel Ángel Lucero Olivas, senador del PT.
Se reconoce a la educación superior como un derecho necesario y a su impartición como un servicio público garantizado por el Estado”, indicó Manuel Añorve Baños, senador del PRI.
Abonará a dotar de mayor certidumbre a las instituciones de educación superior y reafirmará la rectoría del Estado”, mencionó Minerva Hernández, senadora del PAN.
La reforma regula la concurrencia de la Federación y las entidades para el financiamiento de las instituciones.
Se formará un Fondo Federal Especial para asegurar, a largo plazo, los recursos económicos que garanticen la obligatoriedad educativa.
Y se creará un Registro Nacional de Opciones que dará a conocer los espacios disponibles en las escuelas de todo el país.
Que esta ley sea la oportunidad para reconstruir la política pública en educación superior, la política pública que reivindique a las universidades públicas”, dijo Emilio Álvarez Icaza, senador sin partido.
La Ley General de Educación Superior contempla además, penalizaciones para las escuelas privadas con hasta 2.6 millones de pesos, en caso de incumplir el mínimo para el otorgamiento de becas.
El dictamen avalado fue enviado a la Cámara de Diputados.