Más confrontados con la presencia de los cárteles que del Ejército, las y los zapatistas celebran este domingo y el lunes el 30º aniversario de su levantamiento indígena en Chiapas, que inspiró en su tiempo a los manifestantes contra la globalización.
Centenares de simpatizantes del movimiento, procedentes de México y Europa, se concentrarán en la selva cerca de Ocosingo, un poblado a unas cinco horas en auto de San Cristóbal de las Casas, el epicentro del levantamiento de 1994.
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) anunció que brindará un discurso el domingo a la medianoche por el 30 aniversario de su “guerra contra el olvido” de los indígenas de Chiapas.
“Pan, salud, educación, autonomía y paz”
En la noche del 1 de enero de 1994, el EZLN capturó algunas localidades, entre ellas San Cristóbal de las Casas, provocando una respuesta militar que trajo varias decenas de muertos antes de un rápido alto el fuego.
El levantamiento tuvo lugar el día en que entró en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que fue sustituido por el tratado comercial T-MEC en julio de 2020.
Este tratado comercial con Estados Unidos y Canadá simbolizó para el entonces presidente, Carlos Salinas de Gortari, el ingreso de México al “primer mundo” de las economías desarrolladas.
El levantamiento zapatista de 1994 en Chiapas, una región pobre y remota, significó el inicio de un año difícil para México que incluyó el asesinato del entonces candidato presidencial Luis Donaldo Colosio y una fuerte crisis económica.
El portavoz del EZLN, el Subcomandante Marcos, resumió entonces las prioridades del movimiento: “pan, salud, educación, autonomía y paz”.
Popularizado por el pasamontañas, la pipa y las palabras poéticas de Marcos, el movimiento tuvo amplia difusión en el extranjero (Francia, Italia, España, etc.).
Nacimiento del movimiento contra la globalización
La rebelión fue considerada por algunos analistas como el nacimiento del movimiento contra la globalización.
“Siento que sopla el viento de Chiapas y de América Latina que nos regenerará”, escribió entonces la exprimera dama francesa Danielle Mitterrand, tras un encuentro con Marcos en 1996.
El diálogo entre el EZLN y el Gobierno mexicano condujo a los Acuerdos de San Andrés para atender las demandas de la población indígena en febrero de 1996. Ese mismo año se creó un Consejo Nacional Indígena (CNI).
¿Qué queda 30 años después?
Actualmente, 30 años después del levantamiento, San Cristóbal de las Casas fue una de las ciudades más visitadas durante las fiestas decembrinas por batallones de turistas mexicanos y extranjeros, indiferentes a las celebraciones zapatistas.
“Ya no se escucha tanto de los zapatistas. Si aún existen, deben estar alejados. Cada vez que he venido, y vengo todos los años, nunca he visto nada de eso aquí”, dijo la turista mexicana Lorena Cruz, de 44 años.
A principios de noviembre, los zapatistas anunciaron la desaparición de sus “Municipios Autónomos Rebeldes”, áreas de Chiapas bajo control de sus simpatizantes, así como el cierre de sus centros culturales, al denunciar el impacto del crimen organizado en la región.
“Hay bloqueos, asaltos, secuestros, cobro de piso (extorsiones), reclutamiento forzado, balaceras”, aseguró el movimiento en un comunicado.
Treinta años después, ¿qué queda del 1 de enero de 1994?. “Antes del levantamiento no se hablaba de los temas indígenas”, dijo el escritor Juan Villoro.
“Se habla cada vez más de lenguas indígenas, de culturas indígenas. Esto es una ganancia. Esto no quiere decir que los principales problemas se hayan resuelto, pero sí que el tema está en el imaginario”, señaló.