Representantes de Ejido El Bajío, ubicado en Sonora, conformado por ejidatarios y su representante legal, Sergio García Camacho, acompañados por miembros de las asociaciones London Mining Network y London Mexico Solidarity, se manifestaron en Londres, Reino Unido, para exigir la ejecución de las 67 sentencias pendientes luego de su lucha que han sostenido en contra de la empresa minera Penmont, cuya dueña es Fresnillo PLC.
Desde muy temprano se dieron cita para protestar frente al edificio en donde se lleva a cabo la reunión anual de accionistas de Fresnillo PLC, empresa cuyas acciones cotizan en la Bolsa de Valores de Londres.
Las sentencias fueron ganadas desde 2014, pero la ejecución no se ha llevado a cabo. En ellas resalta la obligación de la empresa minera a devolver el oro que extrajo ilegalmente del territorio del Ejido El Bajío, así como restituir las tierras a su estado natural, pagar rentas, entre otras.
Los manifestantes, quienes gritaron consignas en defensa del territorio, ingresaron al edificio para sostener un encuentro en la sala de juntas con los accionistas. En ella, frente al estrado, Alejandro Baillères, hijo de Alberto Baillères González (dueño del Palacio de Hierro, accionista del Grupo Peñoles y GNP Seguros) y quien asumió la presidencia luego de la muerte del cuarto hombre más rico de México, sostuvo el encuentro junto a Octavio Alvídrez, director ejecutivo, y otros representantes del consejo de administración.
Bartolo Pacheco Santiago, ejidatario, relató frente a Baillères su testimonio sobre la detención arbitraria y la prisión preventiva del que fue víctima; denunció las presiones e intimidaciones que ha sufrido junto a su familia por parte de trabajadores de la minera.
Los representantantes también exigieron justicia por los asesinatos de José de Jesús Robledo Cruz y María de Jesús Gómez Vega, y por las desapariciones de Raúl Ibarra de la Paz y Noemí Elizabeth López Gutiérrez. Todos y todas miembros de el Ejido.
“Sin respuestas claras, con evasiones y cada vez más molestos, dijeron que la empresa no tenía relación con las muertes […] ni con las desapariciones”, denunció El Bajío.
Los ejidatarios tuvieron la oportunidad de increpar a Fresnillo PLC al cuestionar sobre la ocultación a sus accionistas, sobre el oro que ha extraído de forma ilegal.
Fresnillo PLC, en voz del director ejecutivo y de su actual presidencia, aseguró que respeta la ley y no había ocultado información a sus accionistas. Por su parte, El Bajío señala que tal aseveración es falsa dado que “la empresa no ha reportado a sus accionistas que tiene juicios en su contra que podrían ascender a más de 700 millones de dólares”, denunciaron.
Al finalizar las participaciones de la comisión de El Bajío, su actividad administrativa continuó bajo una tensa calma, “el presidente de la compañía mostró sobre una pantalla las votaciones digitales de los accionistas y se dio el consejo de administración por re-elegido”, expresó el Bajío en un comunicado.
La ocupación de Penmont, empresa subsidiaria de Fresnillo PLC, comenzó en 1991 cuando exploró y enclavó tres proyectos a cielo abierto en este territorio, para extraer oro: La Herradura (1998) , Dipolos-La Soledad (2010) y Noche Buena (2012). Por esta situación los ejidatarios decidieron interponer denuncias.
En 2011, se determinó a través de una primera sentencia que la minera debía desalojar las tierras. Hasta 2013 se llevó a cabo la desocupación. En ese año, 67 ejidatarios interpusieron denuncias por los daños causados al territorio. En 2014 un Tribunal Colegiado ordenó a la minera restituir las tierras del ejido El Bajío y sanar, también, los daños mediambientales, así como la devolución del oro a los dueños originarios, los ejidatarios.
Minera Penmont extrajo 236 mil 709 onzas de oro, con un valor equivalente a 436 millones de dólares.
El 12 de enero de este año el TUA número 28 de Hermosillo, Sonora, dictó sentencia y estableció la nulidad de un título de propiedad otorgado a la minera Penmont, dentro del territorio de Ejido El Bajío, por lo que se ordenó la cancelación de todos los registros referentes a este título ante las diversas autoridades competentes.
Hasta la actualidad las 67 sentencias continúan pendientes y Ejido El Bajío continúa en su lucha, tal como expresaron en sus redes sociales.
Nuestra lucha es por la vida, por la riqueza natural de nuestro desierto, por los pueblos y comunidades que son oprimidos por otras empresas de las industrias extractivistas. ¡El desierto es VIDA! ¡La mina es MUERTE! (5) pic.twitter.com/gZvKidIxfT
— Ejido El Bajío (@Ejido_ElBajio) May 17, 2022