Ha de venir. Vendrá.
¿Cuándo?… No sé. Muy pronto.
Escucho ya su voz remota
y sus pisadas oigo.
Abre la puerta, Alma; que no te tenga
que llamar. Y que esté dispuesto todo:
apagado el fogón, limpia la casa,
y el blanco cirio de la fe, en el fondo.
Ha de venir. Vendrá. Calladamente
me tomará en sus brazos. Así como
la madre al niño que volvió cansado
de correr bosques y saltar arroyos.
Yo le diré en voz baja: “Bienvenida”,
y sin miedo, ni asombro,
me entregaré al Misterio,
pensaré en Dios y cerraré los ojos.
Luis G. Urbina
Al final, cuando solo queda el cuerpo, alguien siempre está ahí junto a aquellos que fueron amadas, queridos, pero ahora por la pandemia se convirtieron en los últimos responsables de que nuestros padres, madres, hijas, hermanos, amigas, los nuestros, los que se han ido puedan concluir dignamente.
No cualquiera tiene el valor, por así decirlo, de cargar o de manipular el cuerpo de una persona ya sin vida, entonces si es fuerte, pero hay que tener un temple sereno y fuerte más que nada’’, afirmó Eric Puente, trabajador de la funeraria Flor de Sinaí.
Eric Puente es el encargado en una funeraria de ir por los cuerpos de los fallecidos, por la crisis sanitaria, asegura que a la semana puede tener hasta 15 servicios, se dice fuerte, pero reconoce que, por la situación de la pandemia, la tristeza, a veces llega.
Afectado de tal manera psicológica no, yo siempre he dicho que cada cabeza es un mundo y piensa diferente, igual ver toda esta situación es triste como te vuelvo a reiterar, pero ante todo y sobre todo tener un respeto’’, consideró Eric Puente, trabajador de la funeraria Flor de Sinaí.
Ante el aumento de fallecimientos por la pandemia, las y los trabajadores funerarios se han visto afectados, se contagiaron, algunos perdieron la vida y otros a sus seres queridos.
Por su parte, la tanatóloga en Previsiones Pedregales del Sur, Saraí Juárez, dijo “mis mejores amigos han fallecido de Covid-19, la semana pasada sepultados a un gran amigo funerario de mi edad que murió de Covid-19’’.
En este momento lo único que puedo pensar solamente en sobrevivir y dejar en Stan by un poco los duelos que tengo pendientes’’.
Ante esta situación, la Asociación Nacional de Directores de Funerarias y el Consejo Ciudadano establecieron una alianza para brindar atención psicológica a estos trabajadores.
Acordamos desarrollar este servicio que básicamente es la provisión de primeros auxilios psicológicos para mejorar emocionalmente frente a una situación crítica que implica un enorme estrés laboral’’, aseguró Salvador Guerrero, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la CDMX.
Todo personal que labore en el sector funerario puede tener atención psicológica gratuita, pues el consejo ciudadano puso a disposición psicólogas y psicólogos las 24 horas los 7 días de la semana, mediante llamada telefónica o chat al 55 55 33 55 33, y es que, en efecto, la pandemia también los ha impactado.
Por su parte, Angelina Martínez, gerente en Previsiones Pedregales del Sur, dijo: “Pues la verdad estamos cansados, agotados mentalmente, emocionalmente tristes porque vemos a las personas perder a sus seres queridos, no poder hacer nada ante esta situación pue porque muchos te piden me quisiera despedir de ellos’’.
Además de la atención telefónica, la asociación nacional de directores de funerarias informó que en los centros de trabajo también funciona servicios terapéuticos para ayudar a sus empleados.
También nos tenemos que cuidar porque también somos seres humanos’’, consideró la tanatóloga en Previsiones Pedregales del Sur, Saraí Juárez
Al final, las y los trabajadores funerarios, pese a los riesgos, miedos y angustia, son los que también ayudan en esta pandemia.
“Nadie está listo’’.
Pero al final de cuentas tenemos que hacer frente’’, consideró Eric Puente, trabajador de la funeraria Flor de Sinaí.