La intensa onda de calor que ha asolado al país durante este mes, comenzará a debilitarse a partir del próximo jueves, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Se espera que la temperatura general comience a descender paulatinamente y que la temporada de lluvias se regularice en unos 10 días.
“Se prevé que la ola de calor termine el jueves y posteriormente, estamos estimando que de 8 a 10 días pueda presentarse el periodo de lluvias, que podría considerarse ya como un periodo de lluvias constantes”, indicó Alejandra Méndez Girón, coordinadora Nacional del Servicio Meteorológico Nacional.
Durante el informe semanal del Comité Técnico de Obras Hidráulicas, la titular del SMN, Alejandra Méndez, recordó que la onda de calor que se ha extendido a lo largo de todo este mes es atípica, y que es consecuencia de un sistema anticiclónico que ha generado estabilidad en la atmósfera prolongada y una elevada entrada de radiación.
Destacó que esto dio pie a las altas temperaturas y que se hayan superado registros máximos, como ocurrió en de Ciudad Victoria, Tamaulipas, el pasado domingo cuando se llegó a 47.4 grados de calor.
También el 13 de junio, en Durango cuando se presentaron por primera vez 40.3 grados; y en Guadalajara, Jalisco, el 13 de junio, cuando tuvo 40.5 grados. Mientras que el 13 de junio -aunque no fue temperatura récord- se llegó a 48 grados en Chihuahua.
La coordinadora del SMN señaló por otra parte, que a pesar de que se ha movido el comienzo de la temporada de lluvias, se mantiene el pronóstico de ciclones tropicales de este año, que son de 16 a 22 en el Pacífico y de 10 a 16 por el lado del Atlántico.
“Estamos esperando que se cumpla ese pronóstico y que a partir de ese sistema de alta presión que está bloqueando la entrada de humedad, al alejarse permita que la zona de convergencia suba, interactúe el fenómeno del Niño, y exista mayor humedad en el país”, añadió la entrevistada.
En otro momento del reporte técnico, el personal de Conagua expuso que la falta de lluvias ha propiciado que se retrase el llenado de las principales presas del país y que, por el momento, 65% de las 210 que administra Conagua están a niveles por debajo del 50% de llenado, esto es, 136 presas.