Representantes de las comunidades de la etnia Comcaác, mejor conocida como Seri, en Punta Chueca, Hermosillo, y el desemboque, en el municipio de Pitiquito, se reunieron para zanjar diferencias políticas después de 15 años.
El objetivo es unir fuerzas para exigir el abasto de agua potable.
En lo que se considera un encuentro histórico, decenas de familias de ambos poblados recorrieron más de 32 kilómetros del desierto de Sonora hasta el paraje El Infiernillo, punto medio entre las dos localidades.
Joel Barnett Morales, gobernador de la nación Comcaác, relató que discrepancias políticas apartaron a las familias y destacó la relevancia de la reunión para exigir a los gobiernos Federal, Estatal y Municipales el suministro del líquido.
El regidor del municipio de Pitiquito, Francisco Fonseca Hoeffer, exhortó a ambos pueblos a iniciar un movimiento por dignificar la calidad de vida de sus hijos y preservar su cultura.